De acuerdo con HRW, la sentencia del alto tribunal de Gauteng Norte obligará a las autoridades sudafricanas a "reflexionar y reconsiderar el anuncio de la retirada del TPI". "Sudáfrica debería seguir los pasos de Gambia, que recientemente canceló su anuncio de retirada del TPI. Un movimiento como tal señalaría el compromiso de Sudáfrica con la Justicia y los derechos de las víctimas.", ha dicho en un comunicado.
En octubre de 2016, el ministro de Justicia, Michael Masutha, anunció a la prensa que Sudáfrica había iniciado el procedimiento de denuncia del Estatuto de Roma --tratado fundacional del TPI-- mediante una notificación a Naciones Unidas.
La decisión del Gobierno sudafricano llegó después de varios fallos contra el Ejecutivo por no arrestar al presidente de Sudán, Omar Hasán al Bashir, durante su estancia en el país con motivo de la celebración de una cumbre de la Unión Africana. El TPI mantiene órdenes de detención contra Al Bashir por cargos de crímenes de guerra, contra la humanidad y genocidio.