Israel aprueba una ley para alimentar forzosamente a los presos palestinos en huelga de hambre

EUROPA PRESS 14/06/2015 18:48

La ley ha sido una iniciativa del ministro de Seguridad Pública, Gilad Erdan, bajo el título de Ley de Prevención de Daños en Huelgas de Hambre, informa el diario israelí 'The Jerusalem Post'. Resta ahora la aprobación definitiva de la norma en la Knesset o Parlamento israelí, un mero trámite dado que la coalición del Gobierno cuenta con mayoría.

El juez deberá consultar a una comisión ética antes de emitir el dictamen sobre la alimentación forzosa, según la nueva ley, que recoge que las autoridades deben agotar todos los esfuerzos para convencer al recluso de que ingiera alimentos y deben advertir al sujeto del peligro de seguir con la huelga de hambre antes de recurrir a la alimentación forzosa.

"Los presos de seguridad querrían convertir las huelgas de hambre en un nuevo tipo de atentado suicida para amenazar al Estado de Israel. No vamos a permitir que nadie nos amenace y no vamos a permitir que mueran presos en nuestras prisiones", ha argumentado el responsable de la iniciativa, el ministro Erdan.

Desde la ONG Profesionales Sanitarios por los Derechos Humanos en Israel han criticado la nueva norma que "legaliza la tortura y las repugnantes violaciones de la ética médica y las convenciones internacionales". "En lugar de alimentar por la fuerza a presos que son humillados y cuyas vidas corren peligro, Israel debería afrontar las demandas de quienes hacen huelgas de hambre tales como el fin de la detención administrativa", una figura legal que permite la reclusión indefinida y sin cargos de los sospechosos de terrorismo, ha indicado la ONG.

También la Asociación por los Derechos Civiles en Israel (ACRI, por sus siglas en inglés), ha recordado que la alimentación forzosa está prohibida y que viola los derechos de los individuos a recibir tratamiento, así como su "autonomía y dignidad".

Desde la oposición, la diputada del Meretz Zehava Gal-On ha calificado de "inmoral esta norma" que solo busca mejorar la posición política del Gobierno a expensas de los derechos de los presos.

Las huelgas de hambre son una de las pocas herramientas de protesta con las que cuentan los presos palestinos contra las condiciones de su encarcelamiento. Estas iniciativas obtienen una gran repercusión fuera de las prisiones.