Uno de los deportados, en particular, de 44 años de edad, habría llegado incluso a reunirse en persona con el atacante, también tunecino, antes del ataque, concretamente en junio de 2015, mientras compartía piso con otro tunecino, ahora encarcelado en Italia.
Amri mató al conductor original del camión y a otras once personas al arrollarlas con su camión cuando paseaban por el mercadillo el pasado 19 de diciembre, y murió cuatro días después.
El terrorista había llegado a Italia en 2011 y se pasó cuatro años en la cárcel por varios delitos.