Foley fue decapitado por el Estado Islámico, una ejecución mostrada en un vídeo divulgado el martes en el que el grupo islamista exigía a Estados Unidos que abandone sus ataques aéreos en Irak. El presidente estadounidense, Barack Obama, respondió que Estados Unidos se mantendría incansable en su lucha contra la campaña de los insurgentes a pesar de la muerte del reportero.
Se desconoce la identidad del asesino de Foley, cuya cara estaba cubierta en el vídeo, si bien se sospecha por su acento que podría ser británico, por lo que las autoridades de REino Unido ya han abierto una investigación al respecto.
Lo que se ha sabido este jueves es que los captores de Foley pidieron a la familia del periodista y al 'GlobalPost', medio para el que trabajaba Foley en Siria, un rescate de 100 millones de euros. El mensaje fue trasladado a las autoridades pertinentes. Sin embargo, la respuesta del Gobierno estadounidense, como viene siendo su política en este tipo de casos fue negativa,