"Tendremos que estar alerta para evitar otro posible acto terrorista", ha subrayado, antes de recalcar que la población debe ser consciente del hecho de que Pakistán está en estado de guerra contra un "enemigo interior", según ha informado la cadena de televisión paquistaní Geo TV.
Asimismo, ha pedido a las compañías telefónicas que pongan fin a la entrega de tarjetas SIM ilegales, advirtiendo de que las autoridades podrían abrir un caso por terrorismo en caso de que las tarjetas de alguna de ellas sean utilizadas en ataques terroristas.
Por último, ha dicho que el Ejército es una institución "responsable" cuyos integrantes se adhieren "estrictamente" a los "principios del Islam" y que, por ello, "nunca harían daño a mujeres y niños". "Los parámetros de las acciones del Ejército están bien definidos", ha manifestado.
Los talibán paquistaníes son una organización al margen de los talibán afganos, comandados por el mulá Omar, si bien en ocasiones han cooperado entre sí. De hecho, los talibán afganos condenaron el ataque a la escuela de Peshawar afirmando que "va contra los valores del Islam".
Sin embargo, un portavoz del grupo Tehreel-i-Taliban Pakistan (TTP) justificó el ataque con el argumento de que el grupo quiere responder así a los ataques que reciben sus "familias" por parte de las Fuerzas Armadas paquistaníes.
"Hemos elegido la escuela del Ejército para el ataque porque el Gobierno está atacando a nuestras familias y mujeres", afirmó Muhamad Omar Jorasani. "Queremos que sientan el dolor", agregó.