Los hechos tuvieron lugar en la fina Boca Grita, donde se habrían citado miembros de las bandas criminales colombianas Clan Úsuga y Los Rastrojos para luchar por el control de la zona fronteriza.
Los 14 fallecidos serían miembros de estas bandas y entre ellos estaría uno de sus líderes, conocido con el alias de 'San Juan', que sería el encargado del contrabando entre ambos países.
Las autoridades de la ciudad colombiana de Cucutá ya se habrían puesto en contacto con sus homólogas venezolanas para abordar este caso.