El Comando General de las Fuerzas Militares, del que es titular el almirante Édgar Cely, aclaró en un comunicado que el niño llevaba una tarjeta que lo identificaba como ciudadano colombiano.
El documento había sido expedido por la Registraduría Nacional del Estado Civil en Ipiales (localidad de la frontera sur con Ecuador), agregó la misma fuente.
"Igualmente, en las pertenencias del menor se halló una tarjeta de ciudadano refugiado expedida por el Ministerio de Relaciones Exteriores del Gobierno ecuatoriano", advirtió el comando de las Fuerzas Militares, que advirtió de que el menor había sido reclutado de manera forzada por las FARC a pesar de esa condición.
El niño murió el lunes junto a trece insurgentes del frente 48 de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) en un bombardeo en las montañas de Ipiales.
En un comunicado divulgado el mismo día de los hechos, el Ejército Nacional había informado de que en el sitio del ataque "fueron capturados heridos dos integrantes de la organización, entre ellos un menor de edad de nacionalidad ecuatoriana".
La confusión sobre la nacionalidad se derivó, al parecer, de una mala interpretación de la tarjeta de refugiado que llevaba el menor, según lo sugirieron hoy las autoridades militares regionales.
En el mismo comunicado, el comando de las Fuerzas Militares hizo responsables a las FARC de la muerte del menor, "al perseverar en su intención de reclutar niños y niñas para sus propósitos terroristas".
Con ello, los rebeldes contravienen "las normas internacionales de derechos humanos y derecho internacional humanitario que prohíben estas prácticas", añadió la autoridad castrense.