La deflagración se produjo a las 8.45 de la mañana del domingo en un edificio de la calle Brioschi, en el sur de Milán, y probablemente fue causada por una fuga de gas. La detonación fue de tal potencia que causó el hundimiento de parte del edificio.
Dos de los heridos son niñas de 7 y 11 años que han sufrido importantes quemaduras y se encuentran ya ingresados en el Hospital Niguarda de Milán.
Hasta el lugar se han desplazado ambulancias y efectivos de Bomberos con perros rastreadores para buscar a posibles víctimas atrapadas en los escombros.