Al parecer, un grupo de hombres armados y vestidos con uniformes militares ha tacado una comisaría de Policía ubicada en la localidad de Jammu, acabando con la vida de seis agentes y un civil.
Tras huir de las fuerzas de seguridad, los milicianos han lanzado otro ataque contra el campamento militar ubicado en la localidad de Samba, matando a otro uniformado.
Estos ataques se producen tres días antes de que los primeros ministros indio y paquistaní, Manmohan Singh y Nawaz Sharif, respectivamente, se reúnan en los márgenes de la 68º sesión plenaria de la Asamblea General de Naciones Unidas.
India acusa a Pakistán de apoyar a los grupos armados que desafían la autoridad de Nueva Delhi en la porción que controla de la región de Cachemira, mayoritariamente musulmana.