El Consejo de Seguridad de Naciones Unidas ha condenado este lunes "en los términos más contundentes" el ataque que el pasado viernes sufrió la fuerza de la ONU y la Unión Africana (UA), la UNAMID, en la región de Darfur. La agresión fue dirigida contra una patrulla y provocó la muerte de un militar de Sierra Leona, así como un herido.
En una declaración los 15 Estados miembro del Consejo piden al Gobierno sudanés que garantice la rendición de cuentas a los responsables, al tiempo que subraya su apoyo a la fuerza compuesta por 23.000 efectivos. La UNAMID quedó establecida en 2008 con el fin de acabar con la guerra entre las tropas gubernamentales --respaldadas por milicias-- y los grupos rebeldes. Al menos 300.000 personas han muerto y 2,7 millones han abandonado sus hogares desde que comenzó el conflicto, en el año 2003.
Los miembros del Consejo ponen de manifiesto que "la UNAMID está trabajando con la Policía sudanesa para encontrar a los autores". Al mismo tiempo remachan que debe ponerse fin "a la impunidad de aquellos que atacan a las fuerzas pacificadoras".
Hace poco más de un mes otro militar murió en un ataque ocurrido en Darfur Oeste. Desde principios de 2008 han fallecido 30 soldados de la UNAMID. Asimismo el órgano de la ONU traslada sus condolencias al Ejecutivo sierraleonés y pide a todas las partes implicadas que cooperen con la misión.