Una mujer de 40 años ha sido asesinada por un agente de policía de Minneapolis (Estados Unidos) después de que la australiana hubiera llamado al 911 para avisar de un posible robo en el callejón detrás de su domicilio.
Uno de los agentes que llegó hasta el lugar de los hechos, disparó mortalmente a Justine Damond a través de la ventana del conductor del coche patrulla, tal y como informa NY Daily.
"Dos policías de Minneapolis respondieron a una llamada del 911 de un posible, justo antes de las 11:30 pm del sábado. "En un momento dado, un oficial disparó su arma, golpeando fatalmente a una mujer", ha dicho el departamento estatal de Policía en un comunicado de prensa.
Los investigadores están buscando imágenes de los hechos, dado que las cámaras de los policías no estaban encendidas y se desconoce porque estaban apagadas. Los oficiales de Minneapolis están obligados a activar sus cámaras durante “incidentes críticos” –cualquier acción de un policía que cause o tenga la intención de causar muerte o daño corporal- de acuerdo con la política del departamento.