El bloguero, Robert Alai, ha negado los cargos y ha sido liberado tras pagar una fianza de 2.000 dólares (cerca de 1.600 euros), si bien se le ha ordenado que no publique comentarios similares mientras continúan las investigaciones, tal y como ha recogido la cadena de televisión británica BBC.
Alai es uno de los blogueros más importantes del país y tiene alrededor de 140.000 seguidores en Twitter. El mismo día en el que tildó al mandatario de "presidente adolescente", publicó los números de teléfono del presidente y de otros altos cargos del Gobierno.
El bloguero ha recibido numerosos apoyos a través de la red social de ciudadanos kenianos que consideran que los cargos contra él forman parte de un intento de las autoridades de coartar la libertad de expresión.