Las tropas israelíes penetraron con tanques y excavadoras unos 300 metros al este del campo de refugiados de Al Bureij, cerca de Gaza capital, precisaron las fuentes.
Entonces se desencadenó un tiroteo con milicianos palestinos que acabó sin heridos y con la retirada de los militares israelíes, según las Brigadas de Azedín al Kasam, brazo armado del movimiento islamista Hamás.
La oficina de información militar israelí dijo desconocer el incidente, que se registró poco después de que grupos armados palestinos lanzaran cinco proyectiles de mortero contra territorio israelí vecino a la franja, sin causar daños personales ni materiales.
Las Brigadas de Azedín al Kasam se responsabilizaron del lanzamiento de cuatro de los proyectiles, en un momento en que Hamás -que gobierna Gaza- trata de convencer a los grupos armados de que se abstengan de atacar Israel para facilitar a Egipto las gestiones para alcanzar un alto el fuego duradero.
Israel y Hamás mantienen sendas treguas unilaterales -que ambos vulneran de forma puntual- desde que el pasado 18 de enero terminó la ofensiva "Plomo Fundido" en la franja que causó unos 1.400 palestinos muertos, en su mayoría civiles.
El líder de Hamás, Jaled Meshal, explicó en un columna publicada ayer en el diario estadounidense "The New York Times" que el movimiento había decidido suspender los ataques contra Israel.
Ese mismo día, según los testigos, miembros de las fuerzas de seguridad de Hamás se desplegaron en zonas fronterizas de Gaza para impedir el disparo de cohetes y proyectiles de mortero contra Israel.