Tony Blair respalda a Miliband "al 100%" y critica la postura de Cameron sobre la UE

EUROPA PRESS 07/04/2015 14:12

El ex primer ministro británico Tony Blair se ha metido este martes de lleno en la campaña electoral con un discurso en el que ha respaldado "al cien por cien" al candidato laborista, Ed Miliband, y en el que ha recriminado al actual jefe de Gobierno, David Cameron, que quiera sacar a Reino Unido de la Unión Europea.

Blair, vencedor de las elecciones en 1997, 2001 y 2005, ha mantenido un perfil discreto a nivel político desde su dimisión en 2007. Con su sucesor en Downing Street, Gordon Brown, también retirado, Blair ha avalado públicamente a Miliband como punta de lanza "del futuro del país".

El ex primer ministro ha afirmado en un discurso que respalda a Miliband "al cien por cien" y ha dicho de él que, al contrario que Cameron, "antepone los intereses del país". Según Blair, el Partido Laborista ha presentado un "excelente" paquete de políticas para responder a los actuales desafíos, también los económicos.

"Siempre he pensado que Ed puede ganar. Estoy seguro y espero que lo logre", ha dicho Blair, que no ha querido aclarar si coincidirá en algún mitin junto a Miliband durante el mes que resta de campaña.

Una de las posiciones laboristas que Blair ha querido aplaudir es el rechazo a la propuesta 'tory' de celebrar un referéndum sobre la continuidad de Reino Unido en la UE. Cameron ha prometido que, si gana las elecciones del 7 de mayo, presentará una iniciativa en este sentido para replantear la actual adhesión.

Para Blair, se trata de una "distracción". Sin embargo, ha advertido de que esta táctica podría acarrear graves consecuencias a nivel interno, ya que la salida de Reino Unido del bloque comunitario conlleva un factor de "impredecibilidad" para la economía y supone dejar al país "fuera del juego del liderazgo" mundial.

El ex primer ministro ha acusado a Cameron de tratar de hacer "concesiones" para ganarse el voto de los simpatizantes del Partido de la Independencia de Reino Unido (UKIP). "Esta cuestión, en la medida en que afecta al futuro del país, es demasiado importante como para comerciar con ella", ha apostillado.

POR "DERECHO"

Cameron, por su parte, ha acusado a Blair de estar "equivocado". "Estoy anteponiendo a mi país al decir que el pueblo de Reino Unido debería poder elegir si quiere seguir en Europa sobre una fórmula renovada o abandonar", ha dicho desde Edimburgo, en una maratoniana jornada que le llevará por los cuatro territorios del país.

En este sentido, ha reiterado su intención de celebrar una consulta antes de que acabe 2017, porque Reino Unido está en su "derecho". "Es el derecho de Europa también", ha añadido, según medios locales.

Blair también ha recibido la réplica del ministro de Finanzas, George Osborne, que ha pronosticado una reducida presencia pública del antiguo jefe de Gobierno. "Sospecho que va a hacer lo mínimo para no ser culpado de la derrota laborista cuando llegue", ha ironizado, en un acto este martes.

Osborne incluso ha considerado que Blair hace un "buen trabajo" al recordar que votar conservador implica apoyar un referéndum sobre la continuidad en la UE y al aparecer sin Miliband, que está "en la otra punta". El ministro ha considerado que, con este distanciamiento, Blair da a entender que el líder laborista es "débil".

UN MES

Los dos grandes partidos británicos no escatiman en actos electorales y primeras figuras de cara a los comicios del 7 de mayo, considerados los más reñidos de la historia reciente británica. Los sondeos pronostican prácticamente un empate entre conservadores y laboristas por encima del 30 por ciento.

'The Guardian' ha traducido esta intención de voto en escaños y ha dibujado un escenario abocado a las alianzas postelectorales. Según estas proyecciones, los conservadores obtendrían 273 diputados en la Cámara de los Comunes, uno más que los laboristas.

Lejos quedan para ambos los 326 escaños que otorgan la mayoría absoluta, al igual que tampoco llegan a los 322 con los que un Gobierno podría superar una moción de censura. Una alianza entre laboristas e independentistas escoceses sumaría 323 diputados, mientras que un acuerdo tripartito entre 'tories', liberaldemócratas y UKIP tendría 305.