La portavoz de la Fiscalía General rusa, Marina Gridneva, ha explicado que los abogados de Kuznetsov habían solicitado la negación de la extradición asegurando que su juicio tenía motivaciones políticos y que su salud y su vida correrían peligro por "las violaciones de los Derechos Humanos" cometidos en Rusia.
El exministro fue detenido en la ciudad de Saint Tropez el pasado 5 de julio de 2013, acusado de estafar a la región de Moscú 3.500 millones de rublos (81,8 millones de euros) entre los años 2005 y 2008 a través de un fraude relacionado con deudas en el pago de los servicios públicos.
La región moscovita perdió 27.000 millones de rublos (631,3 millones de euros) a través de una serie de maquinaciones con sus activos cometidas por Kuznetsov y otros tres sospechosos, uno de los cuales, Valeri Nosov, fue condenado a cuatro años de prisión.