Tras llamar a Emergencias, paró a un coche y dos camiones que se dirigían a una muerte segura. También lanzó un aviso al conductor de un autobús para que se alejase lo antes posible del puente.
Pickering, un antiguo jugador de rugby del equipo local, ha declarado que no ha hecho nada que no hubiese hecho cualquier otro vecino. Pero las emergencias aseguran que su rápida y decidida actuación sirvió para evitar una tragedia. "Ha sido un milagro que no haya más fallecidos", han declarado las asistencias.
Pickering había salido a pasear a su perro. "Cuando salí de mi casa oí un gran ruido como de agua saliendo a presión -ha declarado. Había un fuerte estruendo. Cuando llegue al puente la barandilla había desaparecido". Tras llamar a la policía y detener a un oche y varios camiones vio como la tragedia era inminente: "El puente se estaba viniendo abajo y pude ver las grietas en la piedra". "De repente hubo un estallido muy fuerte y una sección del puente se vino abajo. Debió producirse un efecto dominó porque el resto del puente cayó después". Uno de los policías que se encontraba al otro lado del puente fue tragado por el agua. Es la única víctima mortal de un accidente en el que pudo haber muchas más. LA