La nieve, la verdadera protagonista de Fargo

Luis Murillo (@lmurilloarias) 20/02/2016 08:15

'Fargo'. Temporada 1. Primera escena. Un hombre conduce un automóvil a través de un páramo nevado. De repente, pierde el control del vehículo y se sale de la carretera. Un señor desnudo y atado consigue salir del maletero. Al día siguiente, la policía encuentra su rastro de sangre oculto bajo la última nevada. El rojo del reguero guiará a los agentes hasta el cadáver del secuestrado, cosido a balazos contra el tronco de un árbol.

La nieve blanca y el color rojo de la sangre son señas de identidad y una constante a lo largo de todas las temporadas de la serie. También lo eran de la película en la que se basa, 'Fargo', escrita y dirigida por los hermanos Coen en 1996.

Todas las historias, independientes de una temporada a otra, transcurren en un nevado pueblo de Minessota, en apariencia apacible, en medio de las praderas heladas del oeste americano. Esa atmósfera helada, fría y desangelada de una zona donde nunca suele pasar nada refuerza el concepto visual de una forma muy potente. Es inevitable quedarse pegado a la serie simplemente por los paisajes aparentemente alejados del mundo que muestra, donde la vida parece haberse detenido.

Para generar ese clima que transmiten al telespectador, las nevadas no son el único fenómeno meteorológico que aparece en la serie con un peso fundamental en la trama. Una de las escenas más memorables de la primera temporada es la de la ventisca, en la que los dos policías protagonistas están buscando al asesino y, de repente, uno de ellos cae herido sin saber por quién ha sido atacado.

Cómo surgió la idea de hacer la serie

'Fargo', la maravillosa película de los Coen de 1996, tiene un estilo muy particular, difícil de calificar. Cuenta la historia de un hombre normal que, de repente, se introduce de manera voluntaria en una espiral de crímenes y fechorías que se va complicando exponencialmente. El escenario son los parajes helados invernales del norte de Estados Unidos.

Warren Littlefield era el presidente de la cadena norteamericana NBC cuando en 1997 encargó un piloto sobre una serie basada en la película. No pasó el corte y quedo descartado. Pero en 2010, los estudios MGM vendieron los derechos televisivos de la adaptación a la cadena FX y Littefield se interesó en dirigir el proyecto. Para ello, contactó con el guionista Noah Hawley, que había trabajado en 'Bones' y había desarrollado alguna serie que se emitió sin éxito de público pero con defensores dentro de la crítica.

Al leer los Coen el capítulo piloto, quedaron encantados con la visión de 'Fargo' que tenía Hawley y, con algunas sugerencias y cambios, pusieron su sello de aprobación a la serie que se había vendido por una temporada de 10 capítulos con una historia cerrada.

El resultado es el que os hemos contado con un papel mucho más protagonista de la nieve y los paisajes helados que en la película. Este factor no sólo sirve para rodar unas imágenes con mucha fuerza, sino que también influye directamente en la psicología de los personajes y en cómo son sus vidas.

Cómo sería la fuerza con la que llegó la serie Fargo, que dejó helados a los responsables del que hasta el momento había sido el proyecto de culto de la temporada, 'True Detective', y se llevó, de largo, los premios más importantes. Y ahora, sus seguidores están de suerte porque hace un par de meses la cadena de televisión norteamericana FX renovaba por una tercera temporada de la serie.

La trama (contiene 'spoilers')

La primera temporada cuenta la historia de Lester Nygaard, un gris vendedor de seguros, con una vida anodina e incapaz de hacerse valer frente al resto de humanos desde su adolescencia: compañeros, familiares, amigos o su propia mujer que le tiene dominado.

Sufre un encontronazo casual con Lorne Malvo, un excéntrico y misterioso asesino a sueldo al que le gusta provocar a la gente. Su intervención hace que los instintos ocultos y reprimidos durante años por Lester afloren y comience una huida hacia adelante exorcizando sus demonios interiores, pero manipulado por el mencionado matón, lo que le lleva cometer una serie de crímenes cada vez más sofisticados para ocultar su rastro.

En la segunda temporada de la serie, en 1979, también en un pueblo remoto de Minnesota, un inesperado giro perturba la vida de varias personas: el matrimonio Blomquist y el clan familiar Gerhardt, al que un sindicato mafioso de Kansas City intenta arrebatar su imperio. Mientras tanto, el policía local Lou Solverson investiga los hechos con la ayuda de su suegro, que no es otro que Ted Danson.

Como señas de identidad, una vez más, la nieve, el frío, el humor negro, la sangre sobre el manto blanco y una investigación llevada a cabo por personas normales, aparentemente ingenuos pero, al final, más listos que el resto.

¿Qué nos deparará el año próximo la tercera temporada de 'Fargo'? ¿Volverán la nieve y el frío a ser protagonistas? ¿Mantendrá el nivel? ¿Y el humor negro? Son preguntas que sólo podrán ser respondidas en 2016, cuando hayamos pasado el invierno, la primavera, el verano y volvamos a estar en otoño.