Hombres y mujeres...¿Quién gana?

INFORMATIVOS TELECINCO 26/05/2009 12:17

Uno de los resultados que seguramente más polvareda levantará y que es preferible decirlo en voz baja: Las mujeres son peores conductores que los hombres, porque son más lentas para orientarse en el espacio, según un estudio de la Universidad de Londres.

Ellos podrán ser mejores al volante, pero ellas los superan en darle mantenimiento al coche, porque los hombres se preocupan menos en mantener las ruedas con la cantidad adecuada de aire o en cambiar el líquido anticongelante de los limpiaparabrisas.

Las chicas siempre recuerdan estos detalles, imprescindibles para que el coche funcione mejor.

En el tema de la infidelidad, a pesar de las acusaciones recíprocas, ganan ellos. Una investigación de la Universidad de Virginia demuestra que el 94 por ciento de los hombres alejado de su pareja fue infiel, frente al 80 por ciento de las mujeres.

Otro de los mitos que la ciencia deshace es sobre las dietas. Es cierto que estas pueden convertirse en una obsesión nacional para ellas, sin embargo, son los chicos quienes mejor siguen los regímenes.

Un estudio reciente de un laboratorio neoyorquino demuestra que las mujeres luchan más por evitar comer en exceso, pero son ellos quienes mejor controlan sus apetitos.

Ellas trabajan mejor en equipo, confirmado. Ellas soportan mejor las infecciones y las gripes, porque las hormonas femeninas le dan a su sistema inmunitario una fortaleza superior al de los hombres.

Es falso que ellas se distraen en las compras y se desorientan entre los estantes. Las chicas son capaces de recordar y localizar los productos, mejor que ellos.

Así como también es falso que los chicos sólo pueden realizar una cosa cada vez. Una investigación prueba que ellos son multitareas y que son brillantes contando chistes, pero también demuestra que a ellas nadie las supera en montar los muebles, ni siquiera ellos que siempre han tenido fama de manitas.

En fin, la ciencia ha demostrado que algunos rumores y prejuicios son ciertos, mientras que otros no tienen ni pies ni cabezas.