El padre de Madeleine vuelve a Portugal porque cree que pueden "encontrarla viva"

INFORMATIVOS TELECINCO / AGENCIAS 13/01/2009 23:03

"Queremos ratificar nuestro deseo de trabajar con las autoridades portuguesas tanto como sea posible", ha dicho McCann, cuya estancia prevista en Lisboa será sólo de dos días.

McCann quiere hablar con su abogado, Rogerio Alves, sobre fórmulas de colaborar con las autoridades lusas y "explorar nuevos pasos que todavía no fueron dados y que podrán marcar diferencias" en las investigaciones.

"Es la primera visita a Portugal, pero espero que haya más a lo largo de los próximos meses. El objetivo es ver lo que todavía se puede hacer en la búsqueda de Madeleine", ha explicado. Según Gerry MacCann, la policía británica y de otros países todavía recibe "informaciones de diferentes fuentes" acerca de lo que habría sucedido a Madeleine" y que ha sido "posiblemente vista" en diferentes lugares. Por eso, señaló, es importante analizar el proceso y toda la investigación realizada hasta ahora "para no duplicar pasos y no desperdiciar recursos".

Conflicto con las autoridades portuguesas

En septiembre de aquel año, McCann abandonó precipitadamente Portugal con su esposa, Kate, cuando las autoridades les declararon "sospechosos" en la desaparición de la niña, condición de la que fueron exonerados cuando el caso se archivó por falta de pruebas, en agosto pasado. Los 17 volúmenes del sumario del caso, con 4.000 páginas, recogieron las sospechas de los investigadores de que los padres de Madeleine estuvieron involucrados en la posible muerte de la pequeña.

En este sentido, McCann ha asegurado que por el momento no tiene intenciones de presentar procesos judiciales contra el Estado portugués o medios de comunicación de este país. "Quiero dejar bien claro que lo que sucedió en el pasado ya quedó atrás y lo que deseamos es esforzarnos en lo que puede ser hecho para continuar la búsqueda, esa es nuestra prioridad y siempre lo fue, subrayó.

Madeleine tenía 3 años cuando desapareció mientras estaba de vacaciones con sus padres en la región turística del Algarve. Su búsqueda se extendió a varios países, con una gran cobertura mediática, y generó una campaña de donaciones y recompensas que superó los cuatro millones de euros.

MV