Enloquecido por los celos, Copland se dirigió a casa de Julie con una pistola de la Segunda Guerra Mundial. Un testigo de los hechos afirma que la víctima no se dio cuenta de que llevaba un arma hasta que el presunto asesino no estaba ya dentro de la vivienda.
Preocupado, avisó a la policía mientras veía cómo la mujer golpeaba la ventana y pedía ayuda a gritos. Fue demasiado tarde. Copland, pintor y decorador, le disparó en la parte posterior de la cabeza. Después hizo lo mismo con su hija, de cuatro años.
La pequeña murió en el acto. Julie lo hizo más tarde en el hospital, a donde fue trasladada en helicóptero. Después de matarlas, Copland se suicidó. Según las investigaciones, la víctima estaba manteniendo una relación con un viejo amigo del colegio, con el que se había reencontrado a través de Facebook.
"Me había dicho que Andrew era violento en algunas ocasiones", confesó su nuevo novio a la policía.
JNP