El secretario de Salud de México, José Ángel Córdova, afirmó hoy que "el comportamiento de la epidemia sigue en descenso y que el 89,4% de los municipios del país (unos 2.500) no tiene casos de influenza (gripe A)".
El virus, que en México ha causado 60 muertes y contagiado a 2.386 personas, la mayoría ya dadas de alta, es letal en el 2,5% de los casos.
Córdova recordó que el año pasado murieron en México alrededor de 9.500 personas con cuadros de neumonía grave relacionados con la "influenza estacional" (gripe común).
Sin embargo, el ministro admitió que existe la posibilidad de que el virus AH1N1 haya mutado en una variedad que podría ser más agresiva o que existan dos tipos del mismo virus, aunque aclaró que todavía "es muy temprano" para poder confirmar estas posibilidades porque no hay "ninguna evidencia científica completa" que lo pruebe.
Córdova recordó que el virus AH1N1 "tiene una alta capacidad de mutación, incluso mayor que la del virus del sida", y sostuvo que uno de los dos tipos "sería más virulento que el otro".
Ello podría explicar por qué en algunos pacientes el virus ha sido "más agresivo" y en otros "totalmente benigno", dijo, aunque insistió en que para dar con las diferencias entre el virus original y el nuevo es necesario "la secuenciación del genoma de los mismos".
Entretanto, "la vida económica debe de reanudarse con toda energía y las medidas (sanitarias) recomendadas nos permiten hacerlo con seguridad", afirmó el funcionario de Salud.
A su juicio, esa es "la mejor forma de ir mostrando al mundo que la vida cotidiana se restablece" y que México está "volviendo a la normalidad".
Otra razón de optimismo para el Gobierno es que en los estados de Baja California Sur y Coahuila no se registra una sola persona enferma con gripe A.
También que en los de Campeche, Chiapas, Chihuahua, Durango, Guanajuato, Guerrero, Jalisco, Nuevo León, Oaxaca, Sonora y Yucatán más del 90% de los municipios se encuentra completamente libre del virus.
Actualmente, "el control de la epidemia deberá ser focalizado en las localidades con brotes" y no extendido a todo el país, consideró Córdova
Además, alrededor del 95% de los pacientes que fallecieron en México presentaron los primeros síntomas de la enfermedad antes del 23 de abril, fecha en la que las autoridades lanzaron la alerta sanitaria en el país.
Ese mismo día, México recibió de laboratorios canadienses los resultados de unos análisis que confirmaron la presencia de un nuevo virus en el país nunca antes descrito por la medicina.
"Hemos aprendido a cuidar nuestra salud y la de nuestros hijos con las medidas higiénicas básicas", afirmó.
El Ejecutivo sigue recomendando evitar el saludo de mano y de beso, y mantener el uso de los "cubrebocas" (mascarillas).
No obstante, por primera vez desde el inicio de la alerta sanitaria Córdova dijo que su utilización es solo necesaria "en sitios de aglomeración no controlada como en el transporte público".
Incluso señaló hoy que "los sitios escolares permiten el control de casos por lo que el uso de cubrebocas no es necesario, estrictamente hablando, en las escuelas".
En efecto, en las calles de la capital mexicana cada vez se ven menos personas con mascarillas, lo que en el momento más álgido de la epidemia era el común denominador y se constituyó en un símbolo de la lucha contra la gripe que dio la vuelta al mundo.
Durante un recorrido por algunas avenidas de Ciudad de México algunas personas dijeron a Efe que no utilizan la mascarilla desde que bajó la alarma sanitaria en el país, hace una semana.