El Papa abre la puerta santa de Santa María la Mayor y reivindica el perdón como "antídoto" contra los males del mundo

EUROPA PRESS 01/01/2016 19:03

Durante la homilía de la misa, que se ha enmarcado en el Jubileo de la Misericordia que comenzó el pasado 8 de diciembre, Francisco ha subrayado que "la fuerza del perdón es el auténtico antídoto contra la tristeza provocada por el rencor y por la venganza".

Y ha añadido: "El perdón nos abre a la alegría y a la serenidad porque libera el alma de los pensamientos de muerte, mientras el rencor y la venganza perturban la mente y desgarran el corazón quitándole el reposo y la paz".

Para el pontífice, el perdón indica "el fruto propio y original de la fe cristiana". "El que no sabe perdonar no ha conocido todavía la plenitud del amor. Y sólo quien ama de verdad es capaz de llegar a perdonar, olvidando la ofensa recibida", ha señalado en este sentido.

El Papa ha reflexionado sobre la figura de la Virgen María, que ha definido como "icono del perdón".

PERDÓN SIN CONDICIONES

"Para nosotros, María se convierte en un icono de cómo la Iglesia debe extender el perdón a cuantos lo piden", ha afirmado. Asimismo, ha señalado que la Madre del perdón "enseña a la Iglesia que el perdón ofrecido no conoce límites". El Papa cree que el perdón "no lo puede detener la ley con sus argucias, ni los saberes de este mundo con sus disquisiciones".

"El perdón de la Iglesia debe tener la misma amplitud que el de Jesús en la Cruz, y el de María a sus pies. No hay alternativa", ha señalado finalmente.