Centenares de personas se han reunido en ese emplazamiento, como cada día 3 desde el siniestro, cuando se cumplen siete años y nueve meses y 90 concentraciones convocadas por la asociación. Los participantes en la concentración han guardado cinco minutos de silencio en recuerdo de las víctimas y han coreado lemas 'Sí se puede', mientras mostraban pancartas en las que se podían leer consignas como '¡Justicia!'.
En su intervención, la presidenta de la asociación, Beatriz Garrote, ha destacado la importancia de que se haya abierto una instrucción para analizar las causas del accidente y "despejar las dudas" que tienen los familiares de las víctimas desde 2006. Además, ha recordado que hace un año se emitió el programa de televisión 'Salvados', en un momento en que los políticos les "daban la espalda" y sistema judicial les "falló".
"Es el momento de que se cierre la brecha que separa a la clase dirigente de las personas que sufrimos esas decisiones", subraya Garrote, quien lamenta que existan formas de poder que "toman unas decisiones sin formar parte de la sociedad, sino en posición de élite totalmente alejada de la realidad ciudadana a la que ponen las normas".
En esta línea, ha exigido que los políticos "den la cara de verdad" y que "den respuestas" a la ciudadanía y ha asegurado que "cuando un llamamiento se hace con todos los ciudadanos juntos, al final se consiguen respuestas". "Si el cambio no lo promovemos nosotros, no creo que lo hagan ellos", ha agregado.
"MAL HACER" DE FGV
Durante la lectura del manifiesto, los familiares han recordado que a finales de enero la Audiencia Provincial ordenó reabrir la investigación del accidente de metro y han indicado que las comparecencias de febrero mostraron que "con una baliza se podía haber evitado el accidente y que la lectura de la caja negra se hizo irregularmente en las dependencias de Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana (FGV) sin presencia judicial".
Asimismo, han criticado las "mentiras" del director de FGV, Luis Domingo Alepuz, "diciendo que los datos de la caja negra quedan borrados sólo por el hecho de ser leídos y que FGV no informó de los descarrilamientos que ya había sufrido el mismo vagón que descarriló el 3 de julio de 2006 porque el perito no los pidió", algo que a su juicio pone de manifiesto "el mal hacer de FGV, antes y después del mayor accidente de metro ocurrido en España".
La asociación reprueba que, en marzo, FGV "continúa obstruyendo la investigación" y que, "en vez de aportar el organigrama y las funciones que desempeña cada uno de los comparecientes para establecer las responsabilidades de cada trabajador, ha enviado al juzgado una relación de trabajadores de base que, en algunos casos, 'no recuerdan' o 'no se encargaban de esos temas'".
SEGURIDAD, BALIZAS Y REVISIONES
Esto, han reprobado, "hace que nos preguntemos cómo es posible que FGV pueda prestar un servicio, si sus trabajadores no recuerdan ni sus propias funciones, sobre todo en temas tan importantes como la seguridad, las balizas y las revisiones".
A su juicio, "la investigación sobre la falta de baliza o su incorrecta programación debe ser fundamental en la investigación", ya que "la jueza, en el primer auto del archivo, establece que una baliza hubiera evitado el accidente".
"Lo que sí recuerdan los trabajadores es que nunca recibieron formación de FGV para el cambio de los cristales, a pesar de que la Ley de Prevención de Riesgos Laborales obliga a formar a los trabajadores en las funciones de su puesto", recalcan desde la AV3J, quienes subrayan la importancia de determinar si FGV incumplió esa norma dado que "la mayoría de muertes se produjeron por el desprendimiento de cristales", entre otras cuestiones que reclaman que se esclarezcan.