Grey ha explicado a Informativos Telecinco su teoría de las 'Estrategias de Bioingeniería contra el Envejecimiento Innecesario' (SENS). Cree que tenemos todas las posibilidades para conseguir vivir todos esos años.
El genetista, que no es ningún gurú de la New age como lo demuestra su doctorado en Cambridge, cree firmemente que esta larga vida es posible si "logramos impedir que las personas enfermen", con lo que sobrevivir cientos de años "es un beneficio colateral" y "mucha gente vivirá más tiempo".
El gerontólogo concibe "el cuerpo como una máquina a la que podemos hacer que dure mucho tiempo con una cuidadosa reparación y mantenimiento". Más técnicamente sería "restaurar las estructuras moleculares y celulares del cuerpo como eran en la temprana adultez, a través de la medicina regenerativa. Restituir las funciones del cuerpo, física y mentalmente".
La SENS defiende que el objetivo principal "es frenar el envejecimiento con tratamientos que nos mantengan en apariencia y funcionalmente como jóvenes adultos durante todo el tiempo que vivamos".
Una tesis con muchos críticos, pero que nadie puede refutar
Lafundación Matusalén, entidad de investigación que preside, estudia desde hace 14 años cómo hacerlo. Sus palabras parecen una profecía, pero lo cierto es que este hombre de apenas unos 40 años ha resistido con aplomo las críticas y los traspiés de los científicos más reacios a creer que la vida eterna es posible.
Una revista británica especializada en estos temas promovió en 2005 un premio de 20.000 libras de esterlinas para el biólogo molecular que fuera capaz de determinar con elementos científicos si la tesis de Grey era ciencia o fantasía.
Nadie pudo ganar la recompensa, ninguno de los cincos expertos del MIT consiguió probar que lo que argumenta este biomédico británico es falso. Unos dijeron que lo que propone la Estrategia contra el envejecimiento no es ciencia, otros que es altamente especulativa.
En general, las opiniones se centraron en que la teoría de Grey "no ha podido llevarse a la práctica con los conocimientos científicos y tecnológicos actuales". Uno de los expertos del renombrado instituto estadounidense explicó que los propósitos de Grey tendrán que esperar para que puedan verificarse.
Grey asegura que con un poco de suerte, "tenemos un 50 % de posibilidades" de llevar a la práctica en 25 años lo que por el momento son teorías. "Si somos desafortunados nos podría tomar 100 años, aunque un 50 % de probabilidades debería ser suficiente para motivarnos".
Ante la duda de si Grey tuviera suerte y dinero para desarrollar sus teorías y consiguiera que los seres humanos fuéramos durante muchos años, según sus propias palabras, "jóvenes adultos" no estaría provocando un desequilibrio del natural proceso de la existencia humana.
Grey responde con una pregunta que lleva una buena dosis de ironía. "¿Acaso la revolución industrial no rompió ese equilibrio? ¿No lo hizo antes el descubrir que con normas de higiene se podía evitar que muchos bebés murieran por infecciones? Estoy seguro de que sí. Es natural para los seres humanos redefinir qué es natural. Podría ser contranatura que el hombre renegara de su intelecto y dejara el mundo tal y como lo encontró, con todo lo que de natural tiene el sufrimiento".