Pierde 65 kilos y se venga de los que le rechazaron por obesa

Informativos Telecinco/ Agencias 08/10/2016 11:40

Emma Pope ha sido una más de las víctimas que han sufrido insultos y comentarios despectivos por su apariencia física. Ella tiene 23 años y, tras una infancia marcada por el 'bullying', decidió cambiar radicalmente su apariencia física, bajar 65 kilos y mejorar su estado de salud.

La chica le ha dado una lección a aquellos que la humillaron, durante la adolescencia era el objetivo de todas las burlas. Una de las escenas que más recuerda fue cuando en un partido de voleibol sus compañeros comenzaron a exigir la salida del campo de la chica debido a sus limitaciones físicas. Se armó tal escándalo durante el partido que tuvo que acudir la policía. Sin embargo, ahora, tras haber cambiado físicamente, es ella quien rechaza a todos los que le trataron mal.

La joven llegó a pesar 142 kilos debido a que comía de manera descontrolada grandes cantidades de pizzas y pastas. Emma Pope hacía ejercicio, aunque no lo suficiente como para evitar el sobrepeso generado por el desorden alimenticio.

Todo eran burlas y malos comentarios hasta que un día se hartó, inició una dieta y comenzó la transformación. Al principio, empezó a reducir sus raciones de comida y ejercitarse al menos cuatro veces a la semana. Luego, con el paso del tiempo, llegó a adelgazar unos 65 kilos y lucir una figura envidiable como así muestra la joven en su cuenta de Instagram.

En una entrevista con el portal Daily Mail, Emma Pope dijo que sus compañeros, los mismos que antes la humillaban, se han intentado acercar y le han invitado a salir. “Ahora me tratan de manera diferente”, contó. Desde luego, la chica rechaza todo intento de acercamiento de aquellas personas que le trataron mal en su momento. Incluso dijo que le parece ofensivo que intenten conquistarla.

“No se están disculpando por la bondad que hay en su corazón. Por ello, ante cualquier intento de ligar conmigo les rechazo de inmediato”, comentó. También reveló que otras chicas que antes no hablaban con ella, ahora se acercan para pedirle consejos sobre cómo bajar de peso. “Si bien los comentarios crueles eran muy incómodos y difíciles de tratar cuando era más joven, ahora sólo río de ello porque me veo y me siento muy bien”, señaló.

En estos momentos, la chica mantiene una dieta saludable de al menos 2 mil calorías diarias y sesiones de ejercicios de cuatro veces por semana. “Después de tomar la decisión de cambiar mi vida, he tenido que aprender a lidiar con mis emociones de una manera saludable, antes yo era sin duda una comedora profesional”.