El padre Ángel viaja a Asunción y pide alimentos para los pequeños que sufren las inundaciones del fenómeno de 'El Niño'

EUROPA PRESS 07/01/2016 11:34

El fundador de Mensajeros de la Paz, el padre Ángel, ha visitado la ciudad de Asunción (Paraguay), afectada por las inundaciones que está provocando el fenómeno climatológico de 'El Niño' y donde el sacerdote ha alertado de que son necesarios productos de aseo y alimentos.

Según ha indicado la ONG, el padre Ángel ha emprendido este viaje humanitario al país sudamericano acompañado por el director ejecutivo de Mercapital España, Ángel Fernández. Antes de partir, el sacerdote ha sido despedido en el Aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas por el embajador de Paraguay en España, Antonio Rivas Palacios, quien ha advertido de que se teme que el muro de Alberdi se abra como un tsunami. "La ciudad es ya una isla", ha asegurado.

Tras cruzar el Océano Atlántico, en el Aeropuerto Internacional Silvio Pettirossi de Asunción, el padre Ángel ha sido recibido por la presidenta de Mensajeros de la Paz Paraguay, Norma Martínez, y por el viceministro de Relaciones Exteriores, Óscar Cabello, quien ha explicado al fundador de Mensajeros de La Paz que las crecidas de los ríos Paraguay, Paraná, Iguazú y Uruguay son más que un drama de emergencia nacional y ha declarado que "este año va a ser muy difícil para todos los grandes países de América Latina".

En este sentido, el padre Ángel ha recordado las palabras del Papa Francisco. "Dios perdona siempre, el hombre a veces y la naturaleza nunca", ha dicho el sacerdote español, al tiempo que ha recordado que ha llegado a Paraguay "para hacer algo, para ayudar a los damnificados".

"El padre viene a tomarle el pulso a la situación y nosotros colaboraremos con Mensajeros en la cooperación que pueda organizar a partir de aquí", ha añadido por su parte el empresario Ángel Fernández.

Posteriormente, el ministro de Relaciones Exteriores de Paraguay, el embajador Eladio Loizaga, ha recibido al padre Ángel en la sede de la Cancillería junto al jefe del Gabinete Nacional de Emergencia. Allí, el canciller ha calificado este período de lluvias y ríos desbordados como "un dominó desde Missouri y hasta Asunción, que se rompe en pequeños tsunamis". "Las necesidades son numerosas", ha apuntado.

COLABORACIÓN CON EL GOBIERNO

Según ha informado Mensajeros de la Paz, la organización iniciará a partir de ahora una colaboración con el Gobierno paraguayo y empresas españolas que permita a las víctimas de las inundaciones el acceso digno a las necesidades básicas. "Respondiendo a la llamada del Papa Francisco de solidarizarnos con Paraguay con hechos además de con palabras", ha subrayado el padre Ángel.

Tras este anuncio, el padre Ángel ha recorrido en barca los Bañados, las zonas de Asunción más perjudicadas por las inundaciones. En concreto, el sacerdote ha recorrido a pie todo el Bañado sur, deteniéndose a hablar con las familias desplazadas, que le han enseñado sus casas improvisadas con maderas, chapas y bolsas. "Se necesita un plan de emergencia rápido", ha declarado el padre Ángel, quien ha agregado que "se necesitan productos de aseo y alimentos" y que "hay muchos niños que podrían enfermar".

Sobre las consecuencias de la inundaciones, Mensajeros de La Paz ha explicado que las diarreas están siendo frecuentes entre las familias damnificadas debido a la dificultad de acceso al agua potable, así como el lodo formado en los poblados es fuente de dengue. Por otro lado, los sanitarios y el reparto de alimentos no son suficientes para abastecer los más de 122 refugios que se han desplegado en Asunción tras la evacuación de las zonas más cercanas al río.

En el Bañado norte, el padre Ángel y Norma Martínez han tenido que subirse a una barca desde donde han sido testigos de cómo la lluvia ha vulnerado el litoral de la capital: "La gente ha perdido sus casas, de las que sólo hemos visto los tejados", ha lamentado el presidente de Mensajeros de la Paz.

La ONG lleva más de una década trabajando en Paraguay, tras las medidas de emergencia que tomó para paliar los estragos del trágico incendio de 2004. Actualmente, gestiona la residencia de ancianos Gijón Roga, en Luque; un centro de día para personas con enfermedades psiquiátricas, en Encarnación; talleres de costura para mujeres indígenas, en Cerrito; y una guardería en el Bañado, una zona de Asunción muy humilde y en exclusión social cuya vulnerabilidad ha aumentado con las inundaciones, pues la mayoría de sus habitantes ha tenido que ser desalojada en canoa.