"Se restablece el puente aéreo entre el Distrito Federal y Buenos Aires a partir de la cero hora de mañana, de manera tal que podamos tener el vínculo entre México y Argentina", indicó el jefe de Gabinete argentino, Sergio Massa, en una rueda de prensa.
El funcionario indicó, de todas formas, que el Gobierno aplicará "un doble control a los vuelos que llegan desde México, Canadá y Estados Unidos", así como también lo hará con los que han tenido conexión con esos países, y fortalecerá los controles con los viajes a esos destinos.
El anuncio se produjo luego de la reunión del Comité de Crisis, integrado por varios ministerios argentinos con el objetivo de realizar un seguimiento al brote de la gripe A, que empezó en México y se expandió a otros países.
"Vamos a evaluar un conjunto de medidas para fortalecer en 180 millones de pesos (48,6 millones de dólares) el presupuesto para enfrentar con capacidad operativa la gripe A. Tenemos que tener la máxima prevención en los próximos 90 días", añadió Massa.
Por su parte, el canciller argentino, Jorge Taiana, afirmó que el Gobierno "ha actuado en la mejor defensa de la salud" de los habitantes del país, al ser consultado sobre la manera en que la suspensión de los vuelos afectó la relación de este país con México.
"El riesgo de pandemia existe, ningún país está exento", advirtió Massa, al describir las medidas locales para hacer frente al virus AH1N1, que ya provocó 69 muertos en el mundo, 64 de ellos en México.
La ministra de Salud, Graciela Ocaña, confirmó el pasado 7 de mayo el primer caso en el país de la gripe A, un ciudadano argentino que había regresado de México el 25 de abril último.
La semana pasada las autoridades montaron un hospital de campaña en el aeropuerto de Ezeiza, el principal del país, adonde hace unos días arribaron cerca de dos centenares de argentinos que estaban varados en México y que regresaron en un vuelo especial enviado por el Gobierno.