Según asegura el diario Clarín, Griselda había comprado el billete del joven al que conoció a través de Facebook para conocerse en persona. Acompañada por su hija, fueron a buscar al sospechoso al aeropuerto y después, la pareja fue a un apartamento que había alquilado para vivir los dos, ya que hasta entonces Griselda había estado viviendo con su exmarido y sus hijos.
Por la noche, los vecinos del apartamento oyeron una discusión y vieron salir al joven que actualmente está en busca y captura. No fue hasta horas más tarde que, la hija de la fallecida empezó a sospechar al no contestar su madre a las llamadas. Cuando la Policía entró a la fuerza en el apartamento se encontraron el cadáver de Griselda, aunque no había signos de violencia visibles. Sin embargo, las pruebas forenses constataron que la muerte se había producido debido a una "asfixia mecánica manual".