El ministro brasileño de Defensa confirma que los restos divisados en alta mar son del Airbus

AGENCIA EFE 03/06/2009 00:00

Según el ministro, "no hay duda" de que los restos que fueron detectados hoy en alta mar por los sensores de un avión de reconocimiento R-99 y avistados posteriormente por la tripulación de un Hércules C-130, ambos brasileños, son del Airbus A330-200 que hacía el vuelo AF447 con 216 pasajeros y 12 tripulantes a bordo.

Los restos están desperdigados en un área de unos cinco kilómetros de longitud cercana a Sao Pedro y Sao Paulo, unas islas rocosas deshabitadas situadas a unos 704 kilómetros del archipiélago de Fernando de Noronha, el punto más oriental de Brasil, y a 1.296 kilómetros de la ciudad de Recife (nordeste).

"Sumando los materiales divisados por el R-99, el asiento y los cinco kilómetros de restos, se confirma que esto es del Airbus", aseguró Jobim en una rueda de prensa que dio en Río de Janeiro, después de visitar en un hotel a los familiares de los 58 brasileños que viajaban en la aeronave.

Las enormes distancias que tienen que recorrer los aviones que parten de Fernando de Noronha hacen más difíciles las tareas de búsqueda y rescate.

Tras el hallazgo de los primeros pedazos del avión, tanto la Fuerza Aérea como la Marina, que desde ayer barren sin descanso la parte del Atlántico que separa a Brasil de África en busca de la aeronave, enfocaron sus operaciones en el sector descrito por el ministro.

Según la Fuerza Aérea Brasileña, pilotos de dos aviones Hércules C-130 avistaron en la mañana de hoy una poltrona de avión, pedazos blancos, una boya naranja y un tambor, además de manchas de aceite y de queroseno, en dos locales distantes entre si unos 60 kilómetros.

Antes de la rueda de prensa de Jobim, el comando de la Fuerza Aérea había aclarado que hasta que no se recojan los restos, tarea que debe comenzar mañana, no sería posible confirmar si se trata de partes del avión de Air France.

"Aún no podemos decir que sean del avión, porque es necesario retirar una pieza y que contenga un número o marca que la identifique como parte del avión", aclaró en Brasilia el vicedirector de Comunicación Social de la Fuerza Aérea, coronel Jorge Amaral.

La recogida de los pedazos avistados estará a cargo de la fragata Constituição, la corbeta Caboclo y el navío patrulla Grajaú que zarparon ayer rumbo a la región y de otros dos navíos, también de la Marina, que partieron hoy de Río de Janeiro.

Este mismo martes pasó por el sector un mercante holandés, cuya tripulación dijo no haber encontrado nada, y otros dos buques comerciales también están en la zona a pedido de las autoridades brasileñas.

Para facilitar las búsquedas, la Fuerza Aérea montó una base de abastecimiento de combustibles para los aviones militares en el aeropuerto de Fernando de Noronha, un parque natural y paraíso turístico en el Atlántico brasileño.

El gerente de operaciones del aeropuerto, Carlos Gouveia, aclaró que esa pequeña terminal está en estado de alerta y que podrá convertirse en base para las tareas de rescate.

Brasil efectúa las búsquedas de la aeronave desaparecida con ocho aviones y los cinco navíos de la Marina.

Con la Fuerza Aérea Brasileña también pueden colaborar, en caso de que lo requiera, una aeronave francesa Falcon 50 que está en Dakar (Senegal) y un avión estadounidense de patrulla marítima P-3C Orion que llegó hoy a Brasil.

El avión de Air France partió de Río de Janeiro la noche del domingo y se comunicó por última vez con los controladores brasileños a las 22.33 hora local (01.33 GMT del lunes), cuando el comandante del vuelo informó que ingresaría en el espacio aéreo de Senegal una hora más tarde.

La directora de Air France en Brasil, Isabelle Birem, también estuvo hoy en el hotel que aloja a los familiares y señaló que la lista de pasajeros será divulgada "probablemente mañana", cuando la empresa tenga la seguridad de que fueron contactados los parientes de todos los viajeros.