Comerciantes de Sol se quejan por las pérdidas aunque durante el desalojo se consideraron "unos indignado más", como han declarado algunos de ellos cuando la céntrica plaza empieza a recobrar la normalidad.
Jesús, un vendedor del cupón de la ONCE en la Plaza de Sol donde se coloca desde hace tres años, Jesús, ha que las protestas le parecen bien pero "ensucian la plaza y no es presentable para los turistas". A su vez, ha afirmado que, en el momento del desalojo, se consideró "un indignado más".
Por su parte, una dependienta de la pizzería Sbarro, Laura Cozac, ha comentado que desde el comienzo del movimiento 15M "han bajado las ventas y hay menos clientes". Asimismo, ha asegurado que anteriormente hacían entre 1.000 y 1.300 euros de caja para pasar ahora a los 300.
La dependienta ha declarado que esto les ha afectado mucho porque "a la gente le da miedo entrar y que la Policía empiece a pegar". En el momento del desalojo aseguró que pasó miedo.
También ha comentado que le "parece bien lo que está haciendo la Policía, que no los deje pasar" porque los comerciantes "ya han aguantado bastante". La dependienta ha añadido que cree que volverán a acampar en Sol.
Además, una vendedora de lotería desde hace más de 15 años, Mónica, ha apuntado que la situación de los últimos días les ha afectado a su negocio. "Aunque se nota que hoy hay más gente, estos días no había nadie".
Después de la jornada de ayer en la que los 'indignados' recuperaron la plaza, la normalidad ha sido la tónica dominante en la Puerta del Sol, por donde han transitado con total normalidad turistas y madrileños que han querido aprovechar las rebajas sin apenas nada que recuerde la concentración que tuvo lugar anoche en la mítica plaza madrileña.
Los únicos vestigios del 'Movimiento 15M' han sido los policías que todavía durante las primeras horas de este sábado ha seguido apostados en la Puerta del Sol. Cuatro furgones de la Policía Nacional siguen repartidos entre la fachada de la Comunidad de Madrid y en los accesos por Preciados y Carmen, junto con un coche de la Policía Municipal en el centro de la plaza, han constituido el retén de seguridad de la zona.
A primera hora del sábado no había presencia alguna de los 'indignados' y la Puerta del Sol estaba completamente limpia gracias a la labor de los técnicos de limpieza viaria del Ayuntamiento de Madrid, que siguen trabajando en la zona.