El Consejo Audiovisual andaluz recuerda que "la información es un derecho, no un espectáculo o entretenimiento

EUROPA PRESS 30/08/2012 17:38

En declaraciones a Europa Press, Fernández ha insistido en que "el proceso informativo generado por este suceso trágico no puede verse empañado por el inadecuado ejercicio de las libertades informativas por parte de algunos medios de comunicación", por lo que pide rigor para evitar que "la opinión, los juicios de valor, los rumores o las conjeturas se presenten como información".

"La información es un derecho, no un espectáculo, y no es un instrumento al servicio del entretenimiento. Los medios de comunicación deberían abstenerse de tratar estos temas en sus programas de entretenimiento y evitar que, mediante la manipulación de la imagen o el lenguaje, se confunda al espectador predisponiéndolo a favor o en contra de las partes que intervienen en una investigación o vista pública", recalca la consejera del Audiovisual andaluz.

En este sentido, y tras advertir que "debe extremarse el cuidado cuando las informaciones hacen referencia a menores", Fernández destaca que también "debe respetarse escrupulosamente el principio de presunción de inocencia en los procedimientos penales en curso". Sobre todo, añade, porque "la información debe ser plural, rigurosa y contrastada, exponiendo las posiciones de las distintas partes y evitando crear un clima de opinión hostil hacia cualquiera de las personas implicadas".

RECOMENDACIONES

Precisamente con el propósito de recordar a los medios de comunicación las normas esenciales que deben respetar y algunas de las medidas deontológicas a tener en cuenta para obtener, elaborar y transmitir información sobre los sucesos luctuosos y los juicios, el CAA aprobó en 2009 unas recomendaciones que ahora vuelve a transmitir a todos los periodistas y empresas públicas y privadas de comunicación.

Entre ellas, el Audiovisual incluye "primar siempre el interés superior de los menores sobre cualquier otro interés legítimo que pudiera concurrir" y evitar la aparición de estos aún cuando no estén directamente afectados. Además, recuerda que en toda aquella información sobre tragedias y hechos luctuosos, y especialmente aquella que afecte a menores como es el caso, "se debe evitar la elaboración de hipótesis, la divulgación de rumores y la aportación de datos que puedan generar confusión, banalización o la elaboración de juicios paralelos".

Antes que el caso de Ruth y José, el más mediático relacionados con menores fue el de Marta del Castillo. También entonces el CAA emitió unas recomendaciones a los medios para advertirles de que no debían "incentivar juicios paralelos usurpando la función de los tribunales de Justicia" y de que "el riesgo de que el libre ejercicio del derecho a la información acabe induciendo un pseudojuicio puede evitarse respetando escrupulosamente las normas éticas en la obtención, tratamiento y difusión equilibrada o ponderada de la información", consejos todos aplicables en este caso de Córdoba.