¿Y si lo que nos han contado sobre el calentamiento global fuera mentira?

ANDRÉS VILLENA OLIVER 06/12/2009 17:58

En contra de lo que muchos le atribuyen, Gabriel Calzada nunca ha negado el Holocausto. No obstante, este profesor de Economía en la Universidad Rey Juan Carlos carga día sí y día también con la etiqueta de “negacionista”. Su ‘pecado’, declarar abiertamente que no tendríamos por qué alarmarnos por algo de lo que quizá no tengamos ni siquiera culpa.

"Nosotros no hemos descartado que haya cambio climático y que esté provocado por el hombre, pero nuestra posición no es catastrofista; además, sostenemos que la culpabilidad del hombre en todo esto está aún por ver”.

El ‘Climagate’

Una noticia sucedida justo antes del inicio de la Cumbre ha servido para que este Doctor en Economía vea confirmadas sus sospechas. Se trata del denominado ‘Climagate’: la publicación de una serie de correos de científicos del Panel para el Control del Cambio Climático de la que se deduce que estos pudieron haber manipulado los datos históricos de las temperaturas para ajustarlos a sus tesis.

Aunque todo parece indicar que no es precisamente la ‘prueba del nueve’ de una gran conspiración, para Gabriel Calzada, estos e-mails prueban lo que “llevamos tratando de hacer público a lo largo de los últimos años”: "La teoría del ‘palo de hockey’–según la cual estamos en pleno aumento de las temperaturas de la tierra- ha quedado totalmente desacreditada".

El mito

"Una serie de personas han estado vendiéndonos una alarma y una catástrofe recibiendo fondos públicos. Hemos comprobado que este dinero aportado a sus investigaciones iba destinado a estudios en los que se tergiversaban los datos.

Se manipulaban datos de temperaturas, y, además, se impedía a científicos críticos con las tesis principales a que pudieran acceder a los mismos datos para poder hacer algún tipo de contraste o refutación".

¿Conspiración?

De ser válido el análisis de Calzada, asistiríamos a una especie de simulacro sumamente lucrativo para muchos, una especie de ‘conspiración científica’: "Se ha creado una red de intereses gigantes; en España se ha destinado a la causa del cambio climático unos 100.000 millones de euros".

Estudios científicos

Las declaraciones de Calzada se basan en las investigaciones de una serie de científicos a su juicio bastante sólidos: "Hay científicos muy importantes que dicen que lo que está ocurriendo no es para alarmarse ni muchísimo menos". "El estudio más importante a este respecto consiste en la realización de una encuesta a 750 climatólogos cada cinco años. Los resultados de este cuestionario demuestran que ni mucho menos se produce consenso entre la comunidad científica".

Preguntado por si tenemos razones para preocuparnos a partir de su posición, Calzada es claro: "Sí hay razones para estar muy atentos, y para aportar medios en la investigación científica sobre el tema del cambio climático. No hay más que ir a la web de la NASA para ver que llevamos casi doce años sin experimentar calentamiento".

"Michael Mann, uno de los fundadores de la teoría catastrofista, se ha retractado y ha declarado que es mejor que de la Cumbre de Copenhague no salga ningún acuerdo para que podamos replantear las posiciones. Lo que decían los modelos científicos 'oficiales' que iba a ocurrir no ha ocurrido finalmente".

El mismo mensaje, pero en un sentido opuesto del que llevan las organizaciones ecologistas que, como Greenpeace, afirman precisamente lo mismo: los hechos les están dando continuamente la razón. Dos extremos en constante debate, no siempre pacífico del todo: “A mí, en la pausa de un debate, se me ha lanzado gente de Greenpeace llamándome 'rata asquerosa'. Y yo aguanto bien la presión, pero sé de muchos científicos y climatólogos que lo han pasado fatal. No sabes de las presiones a las que estamos sometidos".

No les pagan las industrias

Por último, una pregunta algo menos cómoda: ¿Qué ocurriría si estos científicos fueran, en realidad, una especie de relaciones públicas de las empresas eléctricas y petroleras, preocupadas por su negocio?: “"No recibimos dinero de las petroleras ni de las eléctricas. Pero, y si recibiésemos, ¿qué? Si yo fuese el hijo del dueño de una petrolera, ¿mis argumentos dejarían de valer? Reto a quien quiera que demuestre ese tipo de acusaciones. E, insisto: aunque fuera cierto, los argumentos deberían ser discutidos".

La lucha continúa, para todos: con financiación petrolera o sin ella, Gabriel Calzada seguirá dando sus clases en la facultad de Ciencias Ambientales, rodeado de alumnos miembros de Greenpeace y Ecologistas en Acción. Y muchas fuentes coinciden en que, al final de la licenciatura, lo suelen buscar para que figure en la orla… Algo habrá hecho. A.V.