Tras pasar a disposición judicial, el detenido ha quedado en libertad con cargos, con prohibición de salida del territorio nacional y obligación de presentarse semanalmente al juzgado, según ha informado la Delegación del Gobierno en Navarra en un comunicado.
El detenido, vinculado a la organización terrorista Segi, fue denunciado en el año 2008 a la sección de Menores de la Fiscalía de la Audiencia Nacional como presunto autor de un delito de apología del terrorismo, según la Delegación del Gobierno.
Al detenido se le imputa el ataque a una sucursal del Banco de Santander ubicado en la calle Iturrama de Pamplona, hecho que se produjo sobre las 23.50 horas del día 20. Varios testigos, según la Delegación del Gobierno, afirman haber visto a un grupo de cinco jóvenes encapuchados golpear con mazas las cristaleras y el cajero de la sucursal, así como arrojar bombillas con pintura de color marrón.
Dos de los autores intentaron escapar de la zona en un ciclomotor, que finalmente abandonaron en una calle próxima a la sucursal, junto con dos cascos y unos guantes. Tras las investigaciones sobre este vehículo, se pudo determinar que el detenido era el usuario del ciclomotor.
Según la Delegación del Gobierno, la ejecución del ataque se realizó "con una perfecta planificación", en "circunstancias propias de cualquier atentado de los encuadrados en la denominada kale borroka'.