Los judíos españoles celebran la Fiesta de las Cabañas para agradecer la cosecha y recordar los 40 años en el desierto

EUROPA PRESS 11/09/2013 13:11

De las tres fiestas de peregrinaje --Pésaj, Shavuot (Pentecostés) y Sucot--, esta última es la más larga y "una de la más gozosas" de las celebraciones del calendario bíblico pues se trata de una fiesta de "gratitud y alabanza al Señor" por la cosecha que llega tras un año de esfuerzo cultivando la tierra, según indica la Federación de Comunidades Judías de España (FCJE).

En esta fiesta, los judíos suelen construir en las terrazas de las casas o el jardín, una cabaña (Sucá) con hojas de palma, sin puertas para que entren los invitados y con visibilidad al cielo. La Sucá recuerda así a las antiguas viviendas en el desierto y el precepto dice que durante siete días se debe vivir en ella.

También es costumbre que en la cabaña se coma y se recite la bendición sobre las cuatro especies que, según el Midrash, representan los cuatro tipos de personas que integran la nación judía: el limón, la hoja de palma, la rama de mirto y la hoja de sauce. El precepto de combinar estos cuatro elementos promueve la idea de la unidad del pueblo.

A la Sucá se invoca a los patriarcas y grandes hombres espirituales del pueblo como Abraham, Isaac, Jacob, Moisés, Aarón, José y el rey David. Además se comparte la fiesta con la familia y los vecinos.

Durante los dos primeros días festivos rigen las normas del shabat, es decir, se acude a la sinagoga y se rezan las oraciones típicas de esta fiesta. El séptimo día de Sucot se llama Hoshana Raba (Gran salvación) y cierra el período del juicio divino comenzado por Rosh Hashaná.