Un céntimo al mes de ayuda a la dependencia, es la sorpresa que se ha llevado una familia de Barcelona cuando ha recibido la carta. Es una persona discapacitada de 69 años, es invidente y padece un trastorno bipolar. Cuando ha solicitado la ayuda de la Ley de Dependencia y se la han dado, no daba crédito de lo que le habían ingresado: 18 céntimos por el año y medio que lleva esperando.
La familia ha reclamado una explicación y la razón que les han dado es que Antonio ya cobra una pensión por gran invalidez que es el 150% de su salario: 1300 euros. Así, con la pensión de gran invalidez, no se puede acumular con la ayuda a la dependencia.
En la carta que han recibido les dicen que tiene que cuidarlo su mujer. Pero a ella la acaban de operar de la cadera y estará cuatro meses casi sin poder andar. Ante esto, la familia ha señalado que el Estado se podía haber ahorrado un céntimo de mal gusto y que saldrán adelante con la ayuda de su hija.