La indicación de radioterapia en pacientes oncológicos se incrementará un 22% entre 2010 y 2020

EUROPA PRESS 14/02/2013 17:04

Este aumento viene liderado "por su indicación en cáncer de próstata (35%), gastrointestinal (entre el 22% y el 27%) y pulmón (25%)", explican los expertos. Además, en cáncer de mama se estima un aumento del 16 por ciento, aunque "ya en la actualidad se hace de forma generalizada", sostiene el jefe del Departamento de Oncología del Hospital Gregorio Marañón de Madrid, miembro de la Sociedad Española de Oncología Radioterápica (SEOR) y coordinador de la jornada, el doctor Felipe Calvo.

Los motivos de este incremento son "la contribución radioterápica en tumores iniciales, su buena tolerancia en pacientes geriátricos o pluri-patológicos y su eficiencia como proceso sanitario poco tóxico y ambulatorio", mantiene el experto al tiempo que señala que apuesta por la individualización de los tratamientos.

Así, expone que a pesar de que la personalización terapéutica guiada por moléculas "no está ni mucho menos generalizada en oncología", sostiene que ésta "ya es decisiva en cánceres prevalentes como el de mama, de pulmón y colorrectal, en la prolongación de la vida, en la infra-exposición a toxicidades no necesarias y en la eficiencia socio sanitaria".

ENTRE EL 60% Y EL 70% DE LOS PACIENTES SON TRATADOS CON RADIOTERAPIA

En la actualidad, "entre el 60 por ciento y el 70 por ciento" de los pacientes oncológicos son tratados con radioterapia en alguna fase de la enfermedad, subraya el galeno. Ésta ha experimentado avances en los últimos años, los cuales "se han centrado en el aumento de precisión que permite aumentar el índice terapéutico", señala.

Sin embargo, y pese al potencial curativo de la radioterapia y "el valor de la especialidad para preservar órganos y estructuras previamente afectadas por cáncer", Calvo indica que "la emergencia socioeconómica actual está siendo una catástrofe para la práctica médica de los oncólogos radioterápicos".

Debido a ella, explica que se están bloqueando las inversiones en la reposición de equipos amortizados, se está retrasando la incorporación de la innovación tecnológica a la clínica diaria y se está congelando el proceso de mejora continua que acompaña a la actualización instrumental. Esta coyuntura supone para lo pacientes "comprometer sus oportunidades en cuanto a curación, secuelas y calidad de vida", concluye.