A su juicio, representa "toda una contrarreforma ideológica" que no se fundamenta pedagógicamente en las escasas páginas que la conforman, "ni aporta el más mínimo diagnóstico riguroso de la situación actual que justifique los cambios propuestos".
Para IU, los motivos que exhibe sólo se apoyan en prejuicios o ideas preconcebidas, sin base en investigación alguna que las respalde. "Los cambios impulsados por el ministro José Ignacio Wert darán al traste con los principales avances en la educación pública que se habían conquistado en las últimas décadas, condenando a varias generaciones al fracaso escolar y social", insiste la formación de izquierdas.
Además, no sólo la rechaza porque "da pasos en sentido contrario a "los criterios pedagógicos vigentes", recuperando las reválidas superadas del franquismo, sino porque "ataca frontalmente la equidad social".
En este sentido, insiste en que segrega al alumnado desde los 12 o 13 años y es "profundamente clasista" al perjudicar a los sectores sociales con mayores dificultades socioeconómicas. "Estos retrocesos están pensados sobre todo para que sólo una minoría selecta salga beneficiada", puntualiza.
LAS FORMAS "NO SON LAS ADECUADAS"
Además de por el contenido, considera que las formas empleadas por el Gobierno no han sido tampoco las más adecuadas, ya que, en su opinión, el Ejecutivo de Mariano Rajoy ha dado pruebas de su afán por hurtar del debate público en algo que concierne a toda la ciudadanía y que requiere, además, contar con las voces y aportaciones de expertos y de la propia comunidad educativa.
En este sentido, IU denuncia que el Ministerio de Educación sustituyó en su web el texto completo del anteproyecto de ley por una mera presentación de diapositivas. "De esta forma no sólo trivializó las propuestas del anteproyecto, sino que suprimió de facto la posibilidad de iniciar siquiera un debate riguroso", señala.
De hecho, advierte de que lo que Wert entiende por 'debate' ha sido sólo facilitar una dirección de correo electrónico a la que enviar sugerencias o críticas, sin confrontarlas ni debatirlas en foros abiertos y plurales. "Y ha sido el propio Ministerio quien ha decidido cuáles son consideradas y cuáles no, sin hacer públicas siquiera las que ha recibido", apostilla.
ES NECESARIO UN DEBATE SOCIAL
Izquierda Unida denuncia esta farsa y exige que se abra un amplio debate social, con participación de toda la comunidad educativa, sobre la situación de la educación pública en España que, según sus convicciones, está siendo sometida a los "mayores recortes presupuestarios de todos los tiempos", a la par que se incrementan cuantitativa y cualitativamente las necesidades de los centros a la hora de atender la diversidad del alumnado en las diferentes etapas escolares.
"Resulta evidente que con esta contrarreforma, unida a los brutales recortes educativos que ha impuesto el Gobierno de Rajoy, se pretende profundizar en el proceso de privatización y desmantelamiento de la Educación Pública, algo que tratan de justificar y consolidar con el pretexto de la 'crisis-estafa' que soportamos", sentencian.
Asimismo, el diputado de IU Gaspar Llamazares critica en 'Twitter' que el Gobierno, al suprimir en esta reforma la Educación para la ciudadanía, reducir optativas y recuperar las reválidas, estudiar se convierte en una "carrera de obstáculos al servicio d mercado".
Por su parte, el presidente portavoz de la Izquierda Plural (IU-ICV-CHA) en el Congreso de los Diputados, Cayo Lara, afirma en esta misma red social que los sindicatos, padres y expertos opinan que la nueva ley de enseñanza es "un paso atrás", mientras que para el PP supone "un paso adelante".