Según ha informado el responsable del establecimiento, Xavier Páez, en declaraciones a Europa Press, uno de los ladrones ha entrado con la cara descubierta y el vigilante le ha dejado acceder porque había visitado la joyería por la mañana.
Otros tres compañeros han entrado entonces con cascos de moto para esconder su identidad y han robado una cantidad indeterminada de relojes de marca Rolex, rompiendo las puertas de la tienda y dos vitrina.
Los ladrones no han robado dinero en metálico y se han llevado las joyas en una mochila, aprovechando que otros dos supuestos delincuentes les aguardaban fuera del establecimiento para huir.
En el momento del atraco sólo había el cliente agredido en la joyería, además de cinco trabajadores, ha indicado el mismo encargado.