Así lo han confirmado a Europa Press fuentes cercanas a la investigación, que detallan que el cadáver se encuentra en avanzado estado de descomposición y no presenta signos de violencia, al tiempo que destacan que está pendiente de que le hagan la autopsia.
En concreto, el dispositivo estaba conformado por los agentes de la Guardia Civil, Policía Local y de Protección Civil, entre otros efectivos, así como familiares y voluntarios. En los últimos días, las labores de búsqueda se ampliaron también a Jaén ante la sospecha de que pudiera haberse desplazado hasta allí, además de permanecer en la zona donde desapareció, donde ahora han encontrado su cadáver.
De esta forma, el dispositivo se centraba en el camino de Castro del Río (Córdoba), una zona situada a 1,5 kilómetros del puente de la Maturra, en el camino de Jaén y los márgenes del río Guadajoz, aunque se amplió hace más de una semana a la provincia jiennense tras recibir un aviso de una persona que aseguraba haberla visto.
La mujer, que pasaba unos días en Baena, pero vivía en Barcelona, permanecía desaparecida desde aproximadamente las 12,00 horas del domingo 2 de noviembre, cuando paseaba con su marido por una zona de olivar de su propiedad hasta que en un momento dado el hombre decidió dejarla sentada mientras que él hacía unos trabajos en el campo.
Al regresar a por ella, la mujer ya no se encontraba allí y al poco tiempo los familiares dieron la voz de alarma de su desaparición. El dispositivo de búsqueda rastreó la zona cercana a un cortijo donde la desaparecida trabajó en su juventud, buscó por barrancos y pozos, y tras 17 días de labores han localizado su cadáver.