Lula visita las zonas en las que las inundaciones ya dejaron a 180.000 personas sin casa

AGENCIA EFE 05/05/2009 20:44

"No es momento de desesperarse", dijo Lula a un grupo de alcaldes de varias ciudades afectadas por el fenómeno, con los que se reunió en la ciudad de Teresina, capital del estado de Piauí, poco antes de llevar una palabra de aliento a algunos damnificados alojados en una escuela pública.

"La prioridad cero ahora es atender a todos los que han quedado sin casa", declaró el presidente, quien lamentó las "dificultades burocráticas" que impiden al Gobierno ser más ágil en la atención de los desastres naturales.

"Tenemos muchas leyes y normas de fiscalización, y muy pocas para ejecución", apuntó Lula, el cual dispuso que el Ministerio de Integración Nacional establezca la magnitud de los daños y el dinero que será necesario para atender la emergencia.

Lula pidió a los alcaldes un informe "preciso" sobre el impacto de las lluvias en las áreas de vivienda, educación y salud y también en las carreteras de los estados afectados, que están todos entre los más pobres del país.

El presidente garantizó que "no faltará atención, ni cestas básicas (de alimentos) ni médicos" para asistir a las personas que se han visto obligadas a dejar sus hogares por las inundaciones.

Lula pidió que este desastre "sea aprovechado" para planificar una nueva distribución de la población, para remover a las personas que viven en zonas de riesgo y construir casas en áreas más seguras.

"Tenemos que ver dónde es que el agua subió más, quitar las casas que haya ahí y construir otras donde nadie corra peligro", declaró.

Las lluvias castigan el árido nordeste y el húmedo norte de Brasil desde hace unas dos semanas. Según la Defensa Civil, los estados de Maranhão y Piauí son los más afectados.

La situación también es preocupante en los estados de Amazonas, Acre, Bahía, Ceará, Pará, Paraíba y Río Grande do Norte.

Los pronósticos del servicio meteorológico para todo el norte y nordeste del país no son muy alentadores y vaticinan que las lluvias continuarán al menos durante diez días más, por lo que Defensa Civil ha pedido que se mantenga la alarma en todas esas zonas.