La joven, de 14 años, ha contado al jurado que salió de casa a una noche de mayo para verse con Jordan Maxwell, que por aquel entonces tenía 19 años.
La madre de la joven se encontraba fuera de casa cuando todo sucedió, pero mientras volvía comenzó a recibir varios mensajes de la joven diciéndola que estaba asustada, según cuenta su abogado Ian Fenny.
“Nuestro caso es que esta niña de 14 años no era tan crecida o ingeniosa como creía que era (…) Podemos concluir que se sentía halagada por el interés que mostraba en ella un chico mayor.”, ha dicho su abogado.
Los adolescentes quedaron y se fueron en el coche del chico. Ambos consumieron cannabis y la chica, tras fumarlo, comenzó a sentirse rara.
El chico comenzó a conducir y la chica, que estaba asustada, comenzó a mandarle una serie de mensajes a su madre. “Estoy asustada. Llegaré a casa cuando llegues tú pero necesito hablar contigo. Lo siento.”, versaba su primer mensaje. Cuatro minutos después la mandó otro: “Mamá, estoy asustada.”
El chico condujo hasta un lugar solitario y llevó a la chica a la parte trasera del coche, donde la forzó aunque ella le insistía en que parase.
La chica llegó a casa a la una y media y le acabó contando todo lo sucedido a su madre. Una vez supo el nombre del chico, la mujer se puso en contacto con la policía y el joven fue detenido el 7 de junio.
Jordan Maxwell, por su parte, se ha declarado inocente, alegando que no raptó ni violó a la chica. Mientras tanto, en el juicio, el jurado ha escuchado el vídeo que la policía grabó durante el interrogatorio de la joven, donde dice que se quedó “petrificada” cuando Maxwell abusó de ella.
"Había cerrado la puerta para que no pudiera salir", afirmó. "Me metió en la parte de atrás. Me forzó. Le dije que me dejara en paz pero no lo hizo. Le empujé pero él no me dejaba marcharme.", ha añadido.
El juicio sigue en curso.