Obispos de la Coordinadora de Tierra Santa: "La población de Gaza vive en una prisión"

EUROPA PRESS 14/01/2016 19:26

Así lo expresan en un comunicado publicado tras la reunión de la Coordinadora de Tierra Santa, que mantiene un encuentro cada mes de enero centrado en la oración, la peregrinación y la persuasión, con el objetivo de mostrar la solidaridad con la comunidad cristiana que experimenta "una intensa presión política y socio-económica".

"A la comunidad cristiana y a los jóvenes de Gaza, no os olvidamos. La guerra de 2014 trajo la destrucción de miles de hogares, así como de infraestructuras materiales y sociales de Gaza, y la muerte de israelíes y palestinos. Un año y medio después, al mismo tiempo que encontramos signos de esperanza y la resistencia de la población es destacable, muchos permanecen sin hogar y traumatizados por la guerra. El bloqueo continúa trayendo desesperación a sus vidas y ellos viven efectivamente en una prisión", subrayan los prelados.

Precisamente, recuerdan que durante su visita a la Parroquia de la Sagrada Familia definieron Gaza como una cárcel: "En este Año de la Misericordia una de las obras de misericordia es visitar a los encarcelados y os agradecemos vuestra visita a la prisión más grande del mundo".

Concretamente, los obispos se refieren a la comunidad cristiana de Beit Jala, "donde la confiscación israelí de la tierra y la expansión del muro de separación en el Valle de Cremisan, violando las leyes internacionales, socavan su presencia en la Tierra Santa". "No os olvidamos", aseguran, al tiempo que prometen dar a conocer su situación durante este año, a nivel nacional e internacional.

Ante esta situación, piden a los líderes políticos de todo el mundo que pongan "un mayor esfuerzo" para alcanzar "una solución diplomática que ponga fin a cerca de 50 años de ocupación y resuelva el actual conflicto para que los dos pueblos y las tres religiones puedan vivir juntas en justicia y paz". "El derecho de Israel a vivir con seguridad es claro, pero la continua ocupación desanima a ocupantes y ocupados", añaden.

En todo caso, también afirman que han visto signos de esperanza en "tantos cristianos y musulmanes" que se apoyan y que son, según los prelados, "un ejemplo para todos en un tiempo en el que muchos buscan dividir a las comunidades". "A aquellos israelitas y palestinos que buscan la paz, no os olvidamos", señalan.

Por otro lado, tampoco olvidan a los refugiados cristianos con los que se han encontrado en Jordania y "su trauma y dificultades" al intentar reconstruir sus vidas y piden más esfuerzos a la comunidad internacional para aliviar su situación y trabajar por la paz en la región.

También ensalzan la labor de los sacerdotes, comunidades religiosas y laicos de la Iglesia en Jordania y desean que el Acuerdo Global entre la Santa Sede y el Estado de Palestina les ofrezca "un modelo de diálogo y cooperación entre los estados que respete y preserve la libertad religiosa y de conciencia de todas las personas".