El paciente del primer trasplante de cara, ante el reto de aceptar su nueva imagen

INFORMATIVOS TELECINCO 03/05/2010 17:07

Para bien o para mal, el paciente es ahora un ciudadano totalmente nuevo y tendrá que congraciarse consigo mismo, aceptar su imagen y sobre todo, acostumbrarse y reconocerse. Antes incluso de que comenzara la operación, el equipo de psicólogos lo había preparado para el profundo cambio que iba a vivir en su vida y lo mentalizaron para ello. Según afirma el médico director del servicio de cirugía plástica del prestigioso hospital Vall d´Hebron, Joan Pere-Battet, "el paciente se miró al espejo cuando juzgó estar preparado y en principio pareció satisfecho y calmado". Para Pere-Battet, el paciente podrá llevar "una vida prácticamente igual a la de antes del accidente".

En una entrevista publicada en el diario británico Telegraph hace unos días, el propio Joan Pere Barret revelaba un detalle inesperado sucedido poco después de la operación: al paciente le salió barba, un vello facial que había recibido de un donante.

Después de haber recibido un disparo en la cara, esta persona había estado viviendo durante diez años recluido en su casa, sin poder decir una sola palabra ni comer una comida en condiciones. Ahora tendrá su oportunidad. Joan Pere Battet hace referencia a un problema que no es único: "Mucha gente con este tipo de desfiguramiento sufren este tipo de aislamientos". "En nuestro caso, nuestro paciente solamente salía cuando nadie podía verlo; solo estaba en contacto con su familia (...) Ahora es distinto; ahora tiene planes de futuro, quiere trabajar y tener una vida normal. Estoy seguro de que está deseando ir a un bar y tomarse una cerveza".

Este doctor narra cómo tres días después de la complejísima operación, sus compañeros y él se encontraron con el inesperado problema: la barba del operado estaba creciendo. "Tuvimos que afeitarlo cada tres o cuatro días, lo que le dejaba una leve barba que lo hacía parecer en cierto modo atractivo.

El director del departamento narra cuando el nuevo ciudadano "pidió ver su nueva cara justo una semana después de la operación; estaba muy calmado y nos comunicó a través de una nota escrita que estaba muy contento con la operación. Es una persona muy fuerte". Si el futuro no le sonríe, al menos él podrá sonreír, con sus nuevas facciones, a este.