Así, el partido socialista se compromete a un gran pacto social y político basado en principios que logren hacer efectiva la garantía del Derecho humano al acceso del agua y a un saneamiento de calidad.
En este sentido, consideran que el derecho humano al agua está "íntimamente relacionado" con la dignidad del ser humano y la equidad social, y que el cambio climático exige políticas de adaptación que impliquen planes para luchar con los cada vez más frecuentes y duraderos periodos de sequía y revisiones más profundas de nuestros patrones de desarrollo y economía productiva.
Otras de las propuestas del PSOE pasan por poner en marcha un mínimo vital con las modificaciones legislativas necesarias, la participación de la ciudadanía en los diagnósticos y decisiones sobre la política hídrica, la inclusión de marcos regulatorios con el ahorro y la eficiencia, la depuración y la reutilización como herramientas básicas, la optimización de los procesos de desalación y el blindaje de carácter público del agua.
La secretaria federal de Cambio Climático y Sostenibilidad, Pilar Lucio, ha destacado el agua como un recurso "clave" para el desarrollo humano, social económico y ambiental que se debe preservar de "presiones identitarias, territoriales o especulativas". "Para ello es imprescindible un gran Pacto Social y Político que debemos promover con urgencia y con el que la gran mayoría de las fuerzas políticas estamos de acuerdo", ha añadido.
Finalmente, también propondrá la creación de un Observatorio del Agua que analice los recursos hídricos y oriente la planificación de su uso para garantizar la sostenibilidad desde los ámbitos humano, social, económico y ambiental.