El procesado, de 41 años, saldrá en libertad el domingo tras cumplir ocho de los doce meses a los que fue condenado por exhibicionismo en el país vecino. Es la segunda vez que es excarcelado y en Barcelona se repiten los mismos miedos que tras la primera excarcelación.
Esos temores no parecen infundados no sólo por su currículum (cinco violaciones, cinco agresiones sexuales y cuatro intentos de agresión sexual a menores de entre 9 y 17 años) sino por su reincidencia tras ser excarcelado. El proximo 16 de abril será juzgado en Barcelona por otra supuesta agresión sexual a una mujer el pasado mes de mayo, delito por el que la fiscalía solicita que sea condenado a once meses de prisión.
En su escrito de acusación, la fiscal explica que, sobre las 19.40 horas del 29 de mayo de 2008, Rodríguez Singul se situó delante de Eva, de 31 años, quien se había dormido en una tren de Cercanías que se aproximaba a la estación de Arc de Triomf, se bajó la cremallera del pantalón y empezó a masturbarse "ligeramente inclinado hacia ella".
Al oír que el convoy llegaba a la citada estación, Eva se despertó, sorprendiendo a Martínez Singul, y arreó una bofetada al acusado cuando éste intentó tocarle sus genitales.
El Ministerio Público solicita que se condene al 'segundo violador del Eixample' a 11 meses y 21 días de prisión por un delito de abuso sexual con la agravante de reincidencia y a una multa de 720 euros por una falta de lesiones.
No lo consideran rehabilitado
Martínez Singul quedó en libertad en mayo de 2007 tras cumplir, de acuerdo con el Código Penal de 1989, 16 de los 65 años de prisión a los que fue condenado. Lo curioso es que la puesta en libertad se produjo aunque los expertos no lo consideraban rehabilitado y después de que nunca le fuese concedido un permiso durante esos 16 años por el alto riesgo de reincidencia.
Durante ese tiempo, fue sometido sin éxito a distintos programas de rehabilitación. Un mes después de salir en libertad cometió un delito de exhibicionismo a menores en Perpignan (Francia), cuya autoría pudo establecerse gracias a que, por orden de la Fiscalía, los Mossos d'Esquadra lo vigilaban.
Ni siquiera su propia madre lo cree rehabilitado. En declaraciones a Telecinco, la mujer ha dicho que cree que su hijo no debe quedar en libertad aunque opina que la cárcel no es su lugar. Ha reconocido que tiene miedo por las chicas a las que pueda atacar.
Padece una neurosis
Singul padecía una "neurosis grave rayana en la psicosis" que, no obstante, no afectó de forma importante a su voluntad de actuar de forma consciente en el momento de cometer los hechos, según se recogía en la sentencia en la que se le condenaba. En este sentido, el tribunal señaló en el fallo que Martínez Singul tenía la capacidad para discernir sobre el alcance y trascendencia de sus actos, por lo que no ordenó su internamiento en un centro psiquiátrico como solicitó la defensa.
Martínez Singul recibió el sobrenombre del segundo violador del Eixample porque cometió sus delitos en ese barrio de Barcelona, el mismo lugar donde a principios de los años 80 se produjo una cadena de violaciones cometida por Francisco López Maíllo, el violador del Eixample, que fue condenado a 592 años de prisión. LA