Según explica la organización, se trata del caso más reciente "pero no el único en el que la violencia de género se cobra la vida de un niño en España", como muestran las estadísticas oficiales, según las cuales sólo en 2013 fueron asesinados seis niños y 42 quedaron huérfanos de madre.
"La violencia de género se dirige no solo contra las mujeres sino también en contra de sus hijos e hijas, pues en ocasiones son los 'instrumentos' a través de los cuales se perpetúa dicha violencia", destaca la abogada de la organización Gema Fernández.
Según afirma, "en contextos en los que hay indicios o antecedentes probados de violencia de género, la revisión del régimen de visitas y de la custodia sería un mecanismo idóneo para evitar que el maltrato continúe y para garantizar una protección efectiva a los niños y niñas".
La entidad recuerda que por "una situación similar" a la de Carabanchel, mantiene una demanda contra el Estado ante Naciones Unidas. Se trata del caso de Ángela González, superviviente de violencia de género que, tras separarse de su agresor, continuó siendo hostigada durante las visitas a su hija.
"Ángela hizo uso de todos los medios posibles para evitar que su hija sufriera violencia, pero el maltratador aprovechó un régimen de visitas no supervisadas para asesinar a la niña, antes de suicidarse", explica Women's Link, para quien "el Estado tiene la obligación de proteger de manera efectiva a las mujeres" y para ello, "debe también velar y garantizar los derechos" de sus hijos menores de edad.
Women's Link espera que el Comité para la Eliminación de la Discriminación contra la Mujer de Naciones Unidas declare responsable al Estado español por "dejar en la impunidad" la violencia que sufrieron Ángela González y su hija.
Además, solicita que emita recomendaciones para que España implemente un sistema que logre proteger "de manera real y efectiva" a las mujeres víctimas de violencia de género y a sus hijos e hijas, que son también víctimas de esa violencia por vivir expuestas a ella.