Lloros y lamentos
Si Tania S. hubiera sido nominada con cualquier otro de sus compañeros no lo estaría pasando tan mal como con su tocaya. La benjamina de la academia, la andaluza graciosa, la autora del 'A revorcón with me', ha conectado especialmente con la catalana, la diplomada en turismo, la dueña de Krusty. Dos días después de la gala aún lloraba en el patio al lado de su amiga, cogidas de la mano. El llanto de Tania S. es especialmente amargo porque ella es la alegría de la academia, y nos tiene muy mal acostumbrados. Pero está claro que tiene tanto derecho como cualquiera a expresar sus sentimientos y tener sus días de bajonazo.
A diferencia de lo que sucedería con su compañera, si la expulsada es Tania G. no se notaría mucho su ausencia. Su timidez y escaso afán de protagonismo hace que su presencia se diluya en medio de otras personalidades mucho más fuertes. Esta concursante solo es capaz de destacar en un grupo reducido, lo cual es complicado porque de momento son trece, el número favorito de los aquelarres. En este aspecto las dos Tanias son antagonistas, una tímida y reservada, la otra abierta y expresiva. 1
En lo que sí han coincidido es en la elección del grupo dentro de la academia. Las dos se sientan en lo que el grupo liderado por Iván y Sandra llaman "la otra mesa". Ahí están Virginia, Manu y Chipper, aparte de ellas. Es el grupo minoritario, hasta el punto de que algunos llegaran a pensar que Manu se estaba pasando de grupo cuando la otra noche se fue con su silla al extremo opuesto al que ocupa Chipper en la mesa de la mayoría, sitio que ocupara el primer expulsado Ros. Es curioso que pueda llegar a marcar tanta diferencia el hecho meramente geográfico y circunstancial de como se dispongan en torno a la mesa, algo en cierto aspecto incentivado por el hecho de que haya dos mesas en lugar de una y no les permitan juntarlas.
Aunque lo que más separa a ambos grupos no es el espacio en el vacío entre las dos mesas del comedor, sino una concursante. Se trata de Virginia, esa alumna que "trabaja con las piernas muy abiertas", según la frase desafortunada de Coco Comín que tanta broma puede provocar jugando con los dobles sentidos. No sé si es cuestión de piel, de química o de qué exactamente, pero el mal rollo presente entre ella y fundamentalmente Iván y Sandra es cada vez más evidente. Tengo dicho que no se soportan, y claramente es algo mutuo tan intenso como inexplicable.
Los concursantes imitan
El que Tania G. necesite de la intimidad que da un grupo reducido de personas para soltarse y mostrarse como es en realidad, lo demuestra el 'show' que montaron ayer en un 'box' entre ella, la otra Tania y Manu. En un momento hicieron un repaso impagable de la última gala casi al completo, cantando todas las canciones y, mejor aún, imitando a sus compañeros. 2
Manu llevaba la voz cantante, nunca mejor dicho. ¡Y vaya si canta bien este muchacho! Un día podían proponer la experiencia de dejarle a él cantar la gala entera, como a esos toreros a los que encierran en la plaza con seis toros seis, que se dice. Es más que posible que saliera por la puerta grande a hombros de sus 'fans' y jaleado por sus compañeros.
En lo que sí le siguieron a Manu la broma las Tanias fue en las imitaciones, lo cual sirvió para que viéramos a una Tania G. mucho más activa y desenfadada, disfrutando como nadie del momento, y a la otra poniendo la guinda del humor más fino y malicioso, haciendo casi de directora de escena, como cuando le dice a Manu que abra más las piernas imitando a Virginia y que se duela de las rodillas cuando le tocaba imitar a Reke.
Claroscuros entre Iván y Esther
A la alegría inicial de Iván por cantar con Esther le siguió casi de inmediato la queja y lamentos que protagoniza cada semana este concursante. Trabajar con Esther no es fácil, ya que ella es poco disciplinada, le cuesta centrarse y hace poco caso de las indicaciones de profesores y compañeros. Es algo que está en el origen de las razones que la han llevado a estar repetidamente nominada y que difícilmente la harán alumna de la semana. Su falta de concentración explicaría las quejas de su compañero de dueto de no ser porque esa es la opción por defecto en Iván. 4
A pesar de lo dicho, Esther esta sorprendiendo esta semana cantando el tema de Julieta Venegas de forma más que correcta. Ella tiene una voz bonita y con personalidad que bien utilizada podría llevarla a lo más alto. Evidentemente hay que sacarle provecho, y esta puede ser la semana que Esther lo consiga. Estoy impaciente por ver el pre-pase de micros de esta tarde, en el que comprobaremos si lo que se vislumbró la última gala sobre la progresión de esta alumna fue un espejismo, o como parece indicar su trabajo en los dos últimos días, estamos ante una nueva Esther.
Las vueltas de Pablo a su canción
Pablo sigue dándole vueltas a su canción, el 'hit' música que algunos empiezan a temer no cantarán en plató durante una de las galas. El martes pasado cortaban la emisión del 'chat' cuando apenas llevaban unos segundos de canción, y es que contaba ayer el autor que aún faltan cabos que atar en lo relativo al papeleo legal. Esto concentró la conversación la sobremesa de ayer, con un Pablo bastante monotemático en trono a su obra. 3
Los derechos legales de la canción parece que le tienen preocupado, razón por la cual propuso compartirlos entre todos. Iván, Mimi, Noelia y Reke le insistían en que no lo hiciera, ya que los derechos de autor los debe registrar el autor y en este caso los demás son simplemente intérpretes. Pablo teme que algún día uno de sus compañeros le diga que no quiere participar en una canción que no le aporta un beneficio económico, una idea algo injusta dado que hasta ahora todos se han prestado con idéntico entusiasmo a cantar en grupo su tema. Demasiado ocupado se le ve a Pablo en cosas que no tienen estrictamente relación con su vida académica.