Gal·la Mora habla de sus profesiones antes de saltar a la fama: "Lo odiaba"

Gal·la Mora está utilizando su perfil de TikTok para hablarle a sus seguidores acerca de su vida antes de saltar a la fama al participar en la cuarta edición de 'La isla de las tentaciones'. Así, ha compartido un vídeo en el que, mientras muestra cómo se maquilla, explica a qué se dedicaba cuando todavía no era influencer, un trabajo que considera "un privilegio" en comparación con las profesiones que ha tenido.

Cuando la exnovia de Nico Craiu entró al programa presentado por Sandra Barneda en el verano del año pasado estaba trabajando en una clínica dental como auxiliar, pues había estudiado para ser auxiliar de enfermería, y su sueño era estudiar Odontología en la universidad; un deseo que finalmente no cumplió y es que decidió no matricularse debido a la creciente popularidad que estaba experimentado y que le permitía dedicarse al mundo de las redes sociales.

Pero antes de tener el que ella define como "el trabajo de mi vida" en la clínica dental, tuvo muchos trabajos que no le gustaron mucho y en los que tuvo malas experiencias. El primero de todos ellos fue en un restaurante de su pueblo en Castellón y no tiene un grato recuerdo del mismo: "Fue el peor de todos. Yo realmente me encargaba de la barra y de servir mesas, pero lo odiaba y decidí que nunca más volvería a trabajar en hostelería".

El segundo, en una de las tiendas de una conocida marca de ropa, tampoco fue mucho mejor: "Lo odié y no he vuelto a comprar en esa marca por culpa de trabajar allí. No lo odié por la marca en sí, sino por las compañeras que tenía, que literalmente me hacían el vacío, entonces no me gustó nada". La influencer ha explicado que siguió "echando currículums" para encontrar un trabajo que le gustase más y le contrataron en un restaurante de comida rápida.

En esa conocida cadena estuvo trabajando durante un año y medio, hasta que se fue a vivir fuera de España para acompañar a Nico Craiu hasta Polonia y Rumanía por su carrera como futbolista. "Me encantó todo: los compañeros, el buen rollo, el trabajo... Y tengo que deciros que fue uno de los lugares donde más dinero he ganado", ha confesado la influencer, que añadía que durante los siete años en los que estuvo encadenando diferentes puestos nunca dejó de trabajar en discotecas en los fines de semana.

Cuando regresó a España tras haber vivido en Polonia y Rumanía, Gal·la comenzó a trabajar en el salón de juegos de unos amigos de sus padres: "Tengo que confesar que el trabajo me gustaba, estaba a gusto, pero todo lo que vi de las adicciones no me gustó nada". Tras ello, le contrataron en una clínica dental y cuando se emitió 'La isla de las tentaciones' comenzó a trabajar como influencer, una profesión que le encanta.

"Aunque muchas influencers digan que es un trabajo duro, yo he tenido otros trabajos y esto es un privilegio", ha terminado diciendo la amiga de Sandra Ferriz, que no ha mencionado en este vídeo su trabajo como 'au pair' cuidando a niños y enseñándoles español en Irlanda y Londres, ciudad en la que tuvo una terrible experiencia por el trato que le dio la familia para la que trabajaba.