Conrad revela delante de Charlotte que es hija de David Clarke

telecinco.es 06/05/2012 16:33

Multitud de personas son invitadas la 'fiesta de Hielo y Fuego', entre ellos el abuelo Edward (papel interpretado por el veterano actor William Devane), padre de Conrad y fundador de la emporio de Grayson, que se presenta en los Hamptons en cuanto se entera del futuro enlace. Edward, además, pretende mediar entre su hijo y su nuera para intentar frenar su divorcio y un posible escándalo que perjudicaría gravemente a la compañía.

Jack Porter también ha recibir la ostentosa caja en la que llega su invitación, pero la tira a la basura. El muchacho tiene cosas más importantes en las que pensar: Amanda no responde a su llamadas, ya que Emily se ha quedado con su móvil, y el único recuerdo que le queda de ella es la cinta de videocámara que el ladrón se dejó bajo la cama y que no tarda en descubrir.

Por orden de Emily, que quiere recuperar su entrevista con Treadwell a toda costa, Amanda accede por fin a reunirse con Jack en un motel, a condición de que le entregue la grabación. "La niña a la que querías no soy yo", le revela entonces, pero eso sólo le da mas ganas al tabernero para ver el contenido de la cinta.

Con ayuda de Nolan, que se niega a borrarla magnéticamente como le solicitó Emily, Jack consigue ver la entrevista. En la grabación, una compungida Amanda Clarke de no más de diez años le suplica a Treadwell que hable con Victoria, ya que su padre y ella estaban muy enamorados.

Esa misma noche, Jack se presenta en casa de los Grayson, donde está cenando toda la familia, incluyendo el abuelo, Emily y Declan. Loco de ira, Porter increpa a Victoria por abandonar a su suerte a Amanda, la hija del hombre al que amaba. El rostro de la señora es impenetrable, pero Daniel interviene explicando que David Clarke violó a su madre. Conrad no aguanta más la farsa y termina contando delante de todos que su mujer mantenía una aventura con el supuesto terrorista, y Charlotte es fruto de su amor. Estupor general, comprensible desbandada de la flamante huérfana e indignación de Edward, que solicita a su hijo que dimita de la empresa que preside.

Una última sorpresa le está reservada a Emily cuando llega a su casa. Al parecer, alguien le ha quitado su caja de los secretos y, en su lugar, ha dejado una confirmación de asistencia a la fiesta de compromiso a nombre de Emily Thorne.