Tras escuchar las declaraciones de su hijo Diego, Kiko Matamoros aseguraba que, desde su primera intervención en televisión, pensaba que algo parecido podría ocurrir: "Pienso que cuando uno se mete en este circo es muy difícil controlar determinadas cosas y no le veo un hombre, le veo un chico inmaduro que se piensa, a lo mejor en su fuero interno piensa que le asiste el derecho", decía.